GLOBALWAFERS CO., LTD. 
Los fondos para proyectos en Texas y Missouri establecerían la primera producción estadounidense de obleas de 300 mm para semiconductores avanzados y ampliarían la producción de obleas de silicio sobre aislante, dijo el Departamento de Comercio.
Las obleas son un componente crucial de los semiconductores avanzados y forman parte de los esfuerzos de la administración Biden para impulsar la cadena de suministro de chips.
La subvención prevista apoyaría 4.000 millones de dólares en inversiones previstas por GlobalWafers en ambos estados para construir nuevas instalaciones de fabricación de obleas y crear 1.700 puestos de trabajo en la construcción y 880 en la fabricación.
"GlobalWafers desempeñará un papel crucial en el refuerzo de la cadena de suministro de semiconductores de Estados Unidos al proporcionar una fuente nacional de obleas de silicio que son la columna vertebral de los chips avanzados", declaró la secretaria de Comercio, Gina Raimondo.
En la actualidad, cinco grandes empresas, entre ellas GlobalWafers, controlan más del 80% del mercado mundial de fabricación de obleas de silicio de 300 mm y cerca del 90% de las obleas de silicio se producen en Asia oriental.
Con la subvención prevista, GlobalWafers planea construir y ampliar instalaciones en Sherman, Texas, para producir obleas utilizadas en la fabricación de chips de vanguardia, de nodos maduros y de memoria, y una nueva instalación en St. Peters, Missouri, para obleas utilizadas en chips de defensa y aeroespaciales.
GlobalWafers también planea convertir una parte de su actual instalación de fabricación de obleas de epitaxia de silicio en Texas para producir obleas de epitaxia de carburo de silicio, que son un componente clave para los vehículos eléctricos y la infraestructura de energía limpia.
GlobalWafers dijo en 2022 que construiría una planta de 5.000 millones de dólares en Texas para fabricar obleas de silicio de 300 mm utilizadas en semiconductores, cambiando su plan de invertir en Alemania en medio de las preocupaciones geopolíticas actuales y para "abordar los problemas de resistencia de la cadena de suministro de semiconductores de Estados Unidos."
El Congreso aprobó en 2022 la Ley de Chips y Ciencia para impulsar la producción nacional de semiconductores con un programa de subvenciones a la investigación y la fabricación dotado con 52.700 millones de dólares.
La última adjudicación, al igual que las otras 12 del programa de subsidios para chips anunciadas por un total de hasta 30.100 millones de dólares, aún no se han concretado y las cantidades podrían cambiar después de que el Departamento de Comercio lleve a cabo la diligencia debida. (Reportaje de David Shepardson; Edición de Jamie Freed)
