"La guerra en Ucrania ha tenido un impacto significativo en los mercados energéticos internacionales, lo que ha provocado una volatilidad y un aumento significativo de los precios de los productos petrolíferos y del gas natural en Europa", dijo el director general Matti Lehmus en un comunicado.

Las acciones de Neste subieron un 10% en las primeras operaciones de la mañana.

Su beneficio operativo de abril-junio aumentó un 66% hasta los 769 millones de euros (785,61 millones de dólares), superando la previsión de 700,8 millones de euros realizada por siete analistas encuestados por Refinitiv.

El beneficio operativo de la división petrolera de Neste se disparó hasta los 571 millones de euros desde los 8 millones del año pasado, cuando la rentabilidad se vio lastrada por las restricciones de la pandemia y el mantenimiento de la refinería de Neste en Porvoo.

Tras la invasión de Ucrania por parte de Moscú, Neste dijo que dejaría de comprar crudo ruso. Su uso de petróleo ruso se redujo al 12% desde el 70% de un año antes y desde el 45% del trimestre anterior.

Su margen de ventas comparable para las energías renovables aumentó un 24% hasta los 865 dólares por tonelada y Neste dijo que espera que se sitúe entre los 775 y los 850 dólares en el tercer trimestre.

"Las perspectivas para el tercer trimestre y los sólidos resultados en renovables aumentarán las expectativas", dijo el analista de Inderes Petri Gostowski.

(1 dólar = 0,9789 euros)