PagerDuty, Inc. ha anunciado dos nuevos lanzamientos de productos, PagerDuty Process Automation On Prem 4.0, la plataforma que impulsa la cartera de PagerDuty Process Automation, y PagerDuty Runbook Automation, una oferta de software como servicio que proporciona las mismas capacidades y el mismo valor del que los clientes han llegado a depender de la versión On Prem. A medida que las organizaciones maduran sus estrategias digitales y buscan maximizar las prácticas DevOps, la automatización ofrece mayor productividad y eficiencia. Las soluciones de PagerDuty llevan la automatización a los departamentos y funciones de toda la empresa, ayudando a gestionar el trabajo imprevisible, no estructurado y sensible al tiempo. La versión 4.0 de PagerDuty Process Automation incluye nuevas funcionalidades que se extienden de forma segura entre los distintos entornos de una empresa para permitir la ejecución de procesos integrales, como la adición de nuevas cuentas de clientes en sistemas desplegados globalmente. PagerDuty Runbook Automation es un nuevo software como servicio basado en PagerDuty Process Automation, centrado en ayudar a los clientes a sustituir las tareas manuales o desconectadas documentadas en runbooks o wikis por flujos de trabajo automatizados de autoservicio. Estas nuevas ofertas, que forman parte del conjunto de productos de PagerDuty Process Automation, potencian la misión de PagerDuty’de impulsar la automatización en toda la empresa. PagerDuty® Process Automation On Prem 4.0: La plataforma completa que impulsa la cartera de productos de PagerDuty Process Automation, la recién estrenada versión 4.0 incorpora numerosas mejoras de seguridad, estabilidad y usabilidad. La versión 4.0 aporta mejoras significativas en las capacidades de ejecución distribuida. Ahora es sencillo gestionar de forma segura los casos de uso de respuesta a incidentes o de solicitud de servicios en grandes infraestructuras distribuidas geográficamente, en arquitecturas de un solo inquilino a gran escala, o en los casos en los que se exige una comunicación de “confianza cero” entre entornos seguros.