El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskiy, anunció durante la noche una oleada de sanciones contra 182 empresas rusas y bielorrusas junto con tres particulares. Las empresas se dedican principalmente al transporte de mercancías, el arrendamiento de vehículos y la producción química.

El RBI opera tanto en Rusia como en Ucrania y obtiene aproximadamente la mitad de sus beneficios en Rusia, lo que lo convierte en uno de los bancos europeos más expuestos a ese mercado. Ucrania suele pedir a las empresas, incluida RBI, que abandonen Rusia, aunque es poco probable que sus últimas sanciones tengan un impacto significativo en el negocio ruso de RBI.

"La decisión política del Gobierno ucraniano de incluir en una lista de sanciones a unas 30 empresas rusas de arrendamiento financiero, entre ellas Raiffeisen Leasing Russia, significa que los bienes arrendados de los clientes de Raiffeisen Leasing Russia pueden ser confiscados en territorio ucraniano", declaró un portavoz de RBI.

La empresa alquila artículos como coches y carretillas elevadoras.

"Raiffeisen Leasing Russia" es una filial al 100% de "Raiffeisenbank Russia". El volumen de leasing que financió ascendió a 362 millones de euros (393 millones de dólares) a finales de diciembre de 2022. No ha concluido ningún nuevo contrato de leasing desde el estallido de la guerra", añadió el portavoz.

(1 dólar = 0,9202 euros)