El beneficio operativo antes de amortizaciones del mayor grupo cotizado de servicios de seguridad del mundo, que el año pasado compró la división de seguridad electrónica de Stanley Black & Decker, fue de 2.180 millones de coronas frente a los 1.450 millones de un año antes, con un margen de beneficio trimestral récord del 5,8%.

Los analistas habían previsto por término medio un beneficio de 2.140 millones de coronas, según una encuesta publicada en la página web de Securitas.

"El desarrollo fue impulsado por el negocio de tecnología y soluciones apoyado por márgenes saludables en la adquisición de Stanley Security", dijo el CEO Magnus Ahlqvist en un comunicado.

Excluyendo la adquisición, el crecimiento de las ventas de seguridad electrónica fue del 13%.

"El entorno macroeconómico sigue siendo incierto, pero confío en que estamos bien preparados para seguir prestando servicios de alto valor incluso en tiempos más difíciles", afirmó Ahlqvist.

Las acciones subían un 2% a las 1111 GMT.