La medida de Tesla de recortar los precios y aumentar el volumen, una estrategia que el consejero delegado Elon Musk dijo que forma parte del libro de jugadas de la recesión del fabricante de vehículos eléctricos, ha perjudicado a los recién llegados como Lucid y Rivian.

Lucid comunicó el mes pasado unas cifras de producción y entregas en el primer trimestre inferiores a las de los tres meses anteriores, ya que el aumento de los costes de los préstamos tras la subida de los tipos de interés de la Reserva Federal ha afectado al gasto de los consumidores.

El consejero delegado, Peter Rawlinson, afirmó el lunes en un comunicado que la empresa estaba en camino de producir más de 10.000 vehículos en 2023, frente a una previsión anterior de entre 10.000 y 14.000 unidades para este año.

La empresa registró unos ingresos trimestrales de 149,4 millones de dólares, frente a la estimación media de los analistas de 209,9 millones, según Refinitiv.

Las pérdidas netas de los tres primeros meses del año se situaron en 779,5 millones de dólares, frente a los 604,6 millones de un año antes.

La jefa de finanzas de Lucid, Sherry House, añadió que la empresa cuenta con 4.100 millones de dólares de liquidez, suficiente para financiar al fabricante de vehículos eléctricos de lujo al menos hasta el segundo trimestre del próximo año.

Musk ha dicho que Tesla está dispuesta a sacrificar el margen por el volumen de ventas, pero también está tratando de volver a subir los precios, donde pueda, para igualar las entregas con la producción.

Lucid disponía de 900 millones de dólares en efectivo y equivalentes al final del primer trimestre, frente a los 1.740 millones del cuarto trimestre.

Lucid tiene previsto presentar su vehículo utilitario deportivo Gravity a finales de este año, antes de su lanzamiento en 2024.