La empresa de contabilidad EY se enfrenta a una nueva demanda en la que reclama 1.500 millones de euros (1.660 millones de dólares) en concepto de daños y perjuicios por su papel en la auditoría de los libros de Wirecard antes de que la empresa alemana de pagos se hundiera en 2020.

La demanda fue presentada por el administrador concursal de Wirecard, Michael Jaffe, ante un tribunal de Stuttgart, según informó el viernes un portavoz del tribunal.

Es una de las varias demandas a las que se enfrenta EY en este asunto, incluida una demanda de un inversor presentada la semana pasada en la que reclama más de 700 millones de euros por daños y perjuicios.

EY declinó hacer comentarios, al igual que hizo sobre la demanda de la semana pasada.

La empresa de contabilidad ha rechazado anteriormente demandas en su contra por daños y perjuicios en relación con Wirecard.

Wirecard se declaró insolvente en junio de 2020, debiendo a sus acreedores casi 4.000 millones de dólares, tras revelar un agujero de 1.900 millones de euros en sus cuentas que, según EY, era el resultado de un sofisticado fraude global.

La caída de la firma sacudió al establishment empresarial alemán, poniendo a los políticos que la habían respaldado bajo un intenso escrutinio, junto con los reguladores que tardaron años en investigar las acusaciones contra la empresa de pagos que circulaban antes de su colapso.

Klaus Nieding, abogado que representa a los accionistas en la demanda de la semana pasada, afirmó que EY debería haber visto "con relativa facilidad que los supuestos 1.900 millones no existían en las cuentas correspondientes de Wirecard", porque otro auditor posterior "lo descubrió muy rápidamente". Handelsblatt informó por primera vez del valor de los daños solicitados en el caso de Stuttgart a primera hora del viernes.

(1 dólar = 0,9051 euros) (Reportaje de Tom Sims y Alexander Huebner Edición de Miranda Murray y Sharon Singleton)