Los rendimientos estadounidenses se estabilizaron por debajo de los máximos de 14 años. El petróleo se estabilizó en torno a los mínimos de un mes, pero se mantuvo en la senda de un segundo descenso semanal en medio de un dólar más firme y de la preocupación latente por el crecimiento mundial centrada en China.
Está previsto que el presidente de la Fed, Jerome Powell, hable a las 1405 GMT, mientras que la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, subirá al escenario a las 1900 GMT y los inversores buscarán claridad sobre si se prevén más subidas de tipos y cuánto tiempo planea la Fed mantener los tipos altos.
"No creo que Powell vaya a declarar la victoria todavía porque, aunque la inflación está bajando, sigue habiendo cierto riesgo en los datos", dijo Rufaro Chiriseri, jefe de renta fija para las Islas Británicas de RBC Wealth Management.
"Es probable que Powell y Lagarde se hagan eco del sentimiento de tipos de interés más altos durante más tiempo. Van a errar por el lado de la cautela, sin decir que las subidas son cosa hecha y manteniendo esa opcionalidad sobre la mesa."
Los funcionarios de la Fed enviaron señales contradictorias en la recta final hacia la conferencia. El presidente de la Fed de Filadelfia, Patrick Harker, declaró a CNBC que dudaba de que el banco central tuviera que volver a subir los tipos, pero también indicó que no estaba preparado para predecir cuándo podrían comenzar los recortes de tipos. La presidenta de la Fed, Susan Collins, dijo en el canal de vídeo de Yahoo Finanzas que los tipos pueden estar cerca o en un máximo, "pero ciertamente son posibles incrementos adicionales".
Mientras tanto, Reuters informó de que los responsables políticos del BCE están cada vez más preocupados por el deterioro de las perspectivas de crecimiento y se está generando un impulso a favor de una pausa en sus subidas de tipos, según fuentes con conocimiento directo de la discusión.
El índice paneuropeo de referencia STOXX 600 subió por última vez un 0,2% y va camino de subir un 0,9% esta semana, lo que rompería una racha de descensos de tres semanas.
Los futuros de Wall Street apuntaban a una apertura al alza, mientras que el índice MSCI más amplio de acciones de Asia-Pacífico cayó un 1,2% durante la noche.
El Nikkei japonés cayó un 2%, siendo Advantest, proveedor de Nvidia, el mayor lastre, con una caída de casi el 10%.
El índice del dólar estadounidense -que mide la divisa frente a una cesta de seis pares de los mercados desarrollados, incluidos el euro y el yen- llegó a alcanzar los 104,31 el viernes, un nivel visto por última vez a principios de junio.
"La reciente firmeza del dólar probablemente tenga que ver con algunas de las expectativas de los mercados de un tono duro por parte de Powell", dijo Francesco Pesole, estratega de divisas de ING.
El euro y la libra esterlina cayeron a sus niveles más bajos desde mediados de junio, a 1,0766 y 1,2560 dólares, respectivamente.
Frente a la divisa japonesa, el dólar retrocedió tímidamente hacia el máximo de nueve meses de la semana pasada de 146,545, cotizando tan fuerte como 146,26.
Los datos de los precios al consumo de Tokio del viernes, que adelantan las cifras nacionales, mostraron que la inflación se mantuvo muy por encima del objetivo del Banco de Japón (BOJ). Sin embargo, el retraso en los aumentos salariales puede ser más determinante para dirigir la política.
"No esperamos que el Banco de Japón endurezca la política monetaria porque el repunte de la inflación no se ha traducido en una gran aceleración del crecimiento salarial", escribió Joseph Capurso, estratega de CBA, en una nota a clientes.
Al mismo tiempo, si Powell no es considerado lo suficientemente "halcón" por los operadores de divisas en Jackson Hole, el dólar podría aflojar y situarse en torno a los 145 yenes al final de la semana, afirmó.
El gobernador del Banco de Japón, Kazuo Ueda, tiene previsto hablar en Jackson Hole el sábado.
El yuan chino cotizó ligeramente más débil en los mercados extraterritoriales , cayendo a 7,2929 por dólar. En la semana, sin embargo, ha subido un 0,2%, alejándose del mínimo de 9 meses y medio de 7,349 del jueves.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro de la zona euro y de EE.UU. subieron, y el último se situó en el 4,2551%, alejándose del mínimo de la sesión anterior del 4,174%, pero muy lejos del máximo del martes del 4,366%, el nivel más alto desde noviembre de 2007.
En los mercados energéticos, los precios del crudo subieron el viernes, pero siguieron en la senda de descensos semanales de entre el 0,6% y el 1,6%. El crudo Brent subió 89 centavos, o un 1,1%, a 84,24 dólares el barril, mientras que el crudo estadounidense West Texas Intermediate subió 87 centavos, también un 1,1%, a 79,91 dólares el barril.
