WASHINGTON, 21 abr (Reuters) - La actividad empresarial estadounidense se aceleró en abril a su nivel más alto en 11 meses, según un sondeo publicado el viernes, lo que contrasta con los crecientes indicios de que la economía corre el riesgo de entrar en recesión a medida que la subida de tasas de interés enfría la demanda.

S&P Global indicó que su índice PMI compuesto de producción de Estados Unidos, que analiza los sectores manufacturero y de servicios, aumentó hasta 53,5 este mes. Se trata del nivel más alto desde mayo, tras una lectura final de 52,3 en marzo.

Fue el tercer mes consecutivo en que el PMI se mantuvo por encima de 50, lo que indica crecimiento en el sector privado. La encuesta se realizó entre el 12 y el 20 de abril.

No obstante, los llamados datos duros pintan un panorama cada vez más sombrío. El mercado laboral se enfría, las ventas minoristas disminuyen y la producción manufacturera se desploma, lo que lleva a la mayoría de los economistas a pronosticar una recesión ya en el segundo semestre del año.

Los bancos han endurecido la concesión de préstamos, lo que podría hacer menos accesible el crédito a los hogares y las pequeñas empresas. Las encuestas del Instituto de Gerencia y Abastecimiento, que tienen un historial más largo, han sugerido una pérdida de impulso en el vasto sector de los servicios en marzo y un deterioro significativo de las condiciones en el sector manufacturero.

"Las expectativas empresariales de las compañías estadounidenses siguieron siendo optimistas en abril, y el grado de confianza en las perspectivas para el año que viene subió al segundo nivel más alto desde mayo de 2022", dijo S&P Global en un comunicado.

La medida de la encuesta de los nuevos pedidos recibidos por las empresas privadas subió al 53,2 este mes, también la lectura más alta desde mayo, desde el 50,8 en marzo. El aumento, que se produjo en los sectores de servicios y manufacturas, supuso un repunte de las presiones inflacionarias este mes. El índice de precios pagados por las empresas en concepto de insumos subió a 61,2 desde 59,8 en marzo.

"Este aumento ayuda a explicar por qué la inflación subyacente se ha mantenido obstinadamente elevada en el 5,6% y apunta a un posible repunte, o al menos cierta estabilidad, de la inflación de los precios al consumidor", dijo Chris Williamson, economista jefe de S&P Global Market Intelligence.

Las empresas también aumentaron el número de empleados y señalaron que las vacantes se cubrían con mayor facilidad.

El índice PMI del sector servicios subió a 53,7 puntos, la lectura más alta en un año, desde los 52,6 de marzo. Los economistas consultados por Reuters habían previsto que el PMI de servicios cayera hasta 51,5 puntos.

El índice PMI del sector manufacturero aumentó hasta 50,4, el nivel más alto en seis meses, desde 49,2 en marzo. Los economistas proyectaban un índice de 49. Los nuevos pedidos aumentaron, poniendo fin a seis meses consecutivos de contracción.

(Reporte de Lucia MutikanieEditado en español por Manuel Farías)