Al menos 1.000 refugiados sudaneses han huido de un campamento gestionado por Naciones Unidas en el norte de Etiopía tras una serie de tiroteos y robos, según informaron tres de los refugiados y Naciones Unidas.

Los refugiados dijeron que unos 7.000 de los 8.000 residentes del campamento de Kumer se marcharon a pie a primera hora de la mañana del miércoles tras ser atacados y robados por milicianos locales.

Dijeron que fueron detenidos por la policía poco después de abandonar el campamento, situado a 70 km (43 millas) de la frontera con Sudán, en la región etíope de Amhara. Pidieron no ser nombrados por temor a represalias.

La agencia de la ONU para los refugiados, ACNUR, dijo que tenía constancia de que 1.000 personas habían abandonado Kumer el miércoles porque se sentían inseguras tras una serie de incidentes de seguridad.

Los portavoces del gobierno etíope, la administración regional de Amhara, la policía federal y la agencia nacional para los refugiados no respondieron a las peticiones de comentarios.

Más de 1,6 millones de sudaneses han huido de su país desde que estalló la guerra civil en abril de 2023 entre el ejército y una unidad paramilitar rival. Unos 33.000 han cruzado a Etiopía, según el ACNUR.

Los refugiados sudaneses en Kumer dijeron al ACNUR en una carta reciente que llevan meses enfrentándose a una inseguridad rampante, que incluye secuestros para pedir rescate, asesinatos y robos a mano armada.

Los milicianos amhara llevan casi un año luchando contra las fuerzas federales en toda la región en un conflicto que dejó más de 200 muertos el año pasado, según las Naciones Unidas.

"Ya no podemos quedarnos aquí", dijo uno de los refugiados a Reuters por teléfono. "Hemos sido secuestrados, asesinados y atacados repetidamente desde que llegamos aquí en junio. Hemos decidido volver a Sudán, a pesar de la guerra".

ACNUR describió la situación en el campo como "muy difícil".

"Las razones que dieron para marcharse fueron principalmente que no se sentían seguros en el asentamiento", dijo la agencia en una declaración a Reuters.

"Esto se produce tras varios informes de incidentes de seguridad, incluidos delitos, robos, atracos a mano armada, tiroteos y supuestos secuestros".