El consejero delegado de Adidas, Bjorn Gulden, no habló de negocios con el rapero Ye cuando se reunieron después de la Superbowl el mes pasado, dijo el miércoles, después de que un post en Instagram de Ye, antes conocido como Kanye West, desatara las especulaciones.

Ye publicó una foto de la pareja con el pie de foto "make adidas great again" el 12 de febrero. Gulden dijo que se topó con Ye en el aeropuerto internacional de Los Ángeles después de la Superbowl, añadiendo que no fue un encuentro planeado.

Adidas cortó lazos con Ye en octubre de 2022, deteniendo la producción y suspendiendo temporalmente las ventas de la muy rentable línea de zapatillas Yeezy, tras una serie de comentarios antisemitas que hizo en entrevistas y publicaciones en las redes sociales.

Pero el post de Ye en Instagram del mes pasado desató las especulaciones, entre algunos fans del rapero, sobre un nuevo acuerdo con la marca de ropa deportiva.

"No fue una reunión, no hubo discusiones de negocios", dijo Gulden a los periodistas en la sede de Adidas en Herzogenaurach, Alemania.

Aunque Adidas dejó de producir las zapatillas Yeezy que co-creó con Ye, reanudó las ventas el año pasado para liquidar las existencias restantes y reducir sus pérdidas por el fin de la asociación. Se comprometió a donar parte de los beneficios a organizaciones benéficas que luchan contra el antisemitismo y el racismo.

Gulden también actualizó su Instagram desde la Superbowl, publicando una foto con el empresario estadounidense Robert Kraft, fundador de la Fundación para Combatir el Antisemitismo (FCAS), una de las organizaciones que Adidas se ha comprometido a apoyar.

Las reuniones muestran la cuerda floja que aún tiene que pisar Gulden en su intento de reiniciar Adidas y dejar atrás la ruptura de la empresa.

Por cada venta de zapatillas, Ye recibe una comisión previamente acordada. Gulden declinó el miércoles hacer comentarios sobre la cantidad de regalías pagadas a Ye el año pasado, citando la disputa legal en curso entre Adidas y el rapero.

Adidas ingresó 750 millones de euros por las ventas de Yeezy el año pasado, lo que supuso un beneficio de 300 millones de euros. La empresa reservó 140 millones de euros para donaciones a organizaciones benéficas. (Reportaje de Helen Reid; edición de Jason Neely)