Apple cayó casi un 4% el jueves y provocó una caída de la renta variable estadounidense tras conocerse que China ha ampliado las restricciones al uso del iPhone por parte del personal gubernamental en uno de los mayores mercados de la compañía estadounidense.

La empresa más valiosa del mundo iba a perder más de 100.000 millones de dólares en valor de mercado, según los movimientos de las acciones antes de la apertura del mercado. El miércoles sufrió su peor caída en un día en más de un mes.

Los proveedores de Apple y las empresas con gran exposición a China, como Broadcom, Qualcomm y Texas Instruments, cayeron entre un 1,2% y un 2,8%. La caída del fabricante del iPhone arrastró también a los tres principales índices bursátiles estadounidenses.

Reuters informó a primera hora de que Pekín había dicho a los empleados de algunas agencias del Gobierno central en las últimas semanas que dejaran de utilizar sus móviles de Apple en el trabajo.

La medida comunicada ahondó los temores sobre las consecuencias financieras de las crecientes tensiones entre Washington y Pekín.

En los últimos años, Estados Unidos ha restringido el acceso de China a tecnologías clave, como los chips de última generación, mientras que Pekín ha tratado de reducir su dependencia de la tecnología estadounidense y ha frenado los envíos de empresas estadounidenses, como el fabricante de aviones Boeing.

Varios analistas de Wall Street afirmaron que las restricciones al iPhone demuestran que incluso una empresa con una buena relación con el gobierno chino y una gran presencia en la segunda mayor economía del mundo no es inmune a las crecientes tensiones entre China y Estados Unidos.

Las medidas de Pekín también llegan en un momento en el que Apple está lidiando con un descenso de las ventas del iPhone, siendo China un punto brillante en lo que, por lo demás, fue un decepcionante informe trimestral de beneficios el mes pasado.

"Las restricciones tienen el potencial de ralentizar el crecimiento de las ventas de Apple en China. Esto podría suponer un reto adicional para la compañía", afirmó Tom Forte, analista de D.A Davidson.

Algunos analistas también han advertido de un posible golpe a las ventas debido al nuevo teléfono inteligente Mate 60 Pro de Huawei, que funciona con un chip avanzado fabricado por el fabricante chino de chips por contrato SMIC y que supone un gran avance para el dúo afectado por las sanciones estadounidenses.

Las sanciones habían machacado las ventas de Huawei en su país de origen y permitido a Apple arrebatar parte de la cuota de mercado al favorito nacional.

"Si Huawei tiene la capacidad de suministrar y escalar sus (chips) Kirin 9000S de fabricación nacional, vemos el teléfono de la serie Mate como una oportunidad para que Huawei aumente sus envíos y recupere su cuota de mercado", dijeron los analistas de Bofa Global Research.

Apple podría, sin embargo, ver impulsada su demanda tras un evento la próxima semana en el que se espera que desvele su gama iPhone 15, así como nuevos smartwatches. (Información de Aditya Soni en Bengaluru; Información adicional de Jaspreet Singh; Edición de Shounak Dasgupta)