Estados Unidos está abierto a imponer sanciones a los flujos de petróleo y gas rusos, pero no ha llegado a apuntar a las exportaciones de petróleo y gas de Rusia, mientras la administración de Biden sopesa las repercusiones en los mercados mundiales del petróleo y en los precios de la energía en Estados Unidos.

Tras la invasión rusa de Ucrania, la Casa Blanca impuso sanciones a las exportaciones de tecnologías a las refinerías rusas y al gasoducto Nord Stream 2, que nunca se ha puesto en marcha.

"Vigilaremos y evaluaremos continuamente nuestra postura sobre el crudo ruso en las próximas semanas y meses. Mientras tanto, estamos recurriendo a otros grados de crudo, principalmente de América del Norte y del Sur, para satisfacer las necesidades de producción de combustible", dijo Par Pacific en un comunicado.

Los planes de suspensión de Par Pacific siguen a docenas de otras empresas occidentales, desde Apple, Boeing y Exxon Mobil hasta BP PLC, Shell y la noruega Equinor ASA, que han paralizado sus actividades o anunciado planes para abandonar sus operaciones en Rusia.

Par Pacific posee y explota una de las mayores redes energéticas de Hawai, con 94.000 barriles diarios de capacidad operativa de refinado, un sistema logístico que abastece a las principales islas del estado y 90 puntos de venta al por menor.

La empresa importó 6,9 millones de barriles de crudo ruso en 2021, la quinta mayor cantidad de cualquier otra refinería estadounidense, según datos de la Administración de Información Energética de Estados Unidos.

Otras refinerías estadounidenses se han negado a comentar si están suspendiendo o no las importaciones de crudo y productos refinados rusos, pero varias han detenido sus compras en medio de la incertidumbre sobre las futuras sanciones a los productos y buques petroleros rusos.

Los ejecutivos de las empresas y los comerciantes individuales en los centros de Nueva York y el Golfo de EE.UU. dicen que les preocupa que Washington pueda autorizar movimientos adicionales, y tampoco quieren ser vistos como financiadores de la invasión.

El miércoles, Estados Unidos apuntó al sector ruso de refinado de petróleo con nuevas limitaciones a las exportaciones y apuntó a Bielorrusia con nuevas y amplias restricciones a las exportaciones, a medida que la administración Biden intensifica su ofensiva contra Moscú y Minsk por la invasión de Ucrania.