La empresa estatal China Vanke afirmó que se enfrenta a una presión de liquidez a corto plazo y a dificultades operativas, pero añadió que ha preparado "una cesta de planes" para estabilizar su negocio y recortar la deuda.

Vanke cuenta con el apoyo del regulador de activos estatales de Shenzhen, así como de su mayor accionista, la empresa estatal Shenzhen Metro, después de informarles de su situación, dijo también en una presentación que resumía los comentarios realizados por la empresa en una reunión con analistas el domingo.

El promotor inmobiliario también prometió completar los proyectos y entregar los apartamentos a tiempo.

Las acciones y los bonos en dólares de Vanke se desplomaron la semana pasada después de que S&P le retirara el grado de inversión y de que el promotor confirmara los informes de que se estaba investigando a un ejecutivo, lo que agravó los problemas del asediado sector inmobiliario.