"Cada vez que hay inestabilidad geopolítica en el mundo se produce un contexto de ansiedad que no es bueno para el negocio", dijo Julien Tornare a Reuters en una entrevista telefónica.

"El poder adquisitivo, el precio de la gasolina, el precio del gas son preocupaciones para la gente y el estado de ánimo puede no ser tan bueno como esperábamos", dijo Tornare, que ha estado al frente de la marca desde 2017.

No obstante, dijo que la mayoría de los mercados, en particular el de Estados Unidos, seguían funcionando bien, y que confiaba en que la marca lograría un crecimiento de las ventas de dos dígitos en el primer trimestre y que también aspiraba a ello para el conjunto del año.

Su rival Swatch Group confirmó el jueves que espera un crecimiento de las ventas de dos dígitos este año y que no habrá un impacto material en el negocio por la crisis provocada por la invasión rusa de Ucrania.

Tornare dijo que Rusia no era un mercado clave para la marca, aunque tenía una larga historia allí. "Cuando la situación lo permita, redistribuiremos los medios para desarrollar ese mercado", dijo.

Su empresa matriz, LVMH, cerró temporalmente sus 124 boutiques en Rusia el 6 de marzo, diciendo que seguiría pagando los salarios de sus 3.500 empleados en el país.

Dijo que los nuevos cierres en China para frenar el COVID-19 eran una preocupación, pero que China seguía siendo un importante motor de crecimiento a largo plazo. "Tuvimos un buen comienzo en China en enero. Febrero y marzo fueron un poco más tranquilos".

Tornare dijo que la marca quería absorber parte de los costes más elevados de la energía y las materias primas, pero que subiría los precios a nivel mundial entre un 2% y un 4% en determinadas colecciones en las próximas semanas. El precio medio está actualmente en 10.000 euros (11.087,00 dólares), un 30% más alto que cuando Tornare asumió el cargo de director general.

Con sede en Le Locle, en el oeste de Suiza, Zenith es conocida por sus mecanismos de reloj El Primero, lanzados en 1969, que sólo sobrevivieron a la llegada de los relojes de cuarzo a pilas en los años 70 porque un capataz escondió las herramientas y los planos en un desván de la fábrica en contra de las órdenes de la dirección. Las versiones modernizadas del El Primero siguen impulsando los relojes Zenith en la actualidad, especialmente su colección Defy.

(1 dólar = 0,9020 euros)