Embraer y la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) anunciaron que han iniciado los estudios para una actualización de media vida (MLU) para el avión A-29 Super Tucano. Desarrollado para satisfacer los exigentes requisitos de la FAB, el avión A-29 se utiliza actualmente en el territorio brasileño en misiones de entrenamiento, interceptación aérea y vigilancia, además de ser utilizado por el Escuadrón de Demostración Aérea (EDA), conocido como Escuadrón Humo. Ejemplos de actualizaciones y evoluciones ya aplicadas al producto, que podrían aportar beneficios a la FAB, se encuentran en el sistema de aviónica de quinta generación con capacidad de expansión, en los sistemas de navegación y comunicación, en la ampliación de los sistemas de armamento disponibles y en los sensores de vigilancia y autoprotección de la aeronave.

Las actualizaciones también proporcionan un mayor conocimiento de la situación con mejoras en la interfaz hombre-máquina. Actualmente, la Fuerza Aérea Brasileña cuenta con una flota de 60 aviones A-29 que operan en cinco escuadrones diferentes, totalizando más de 325.000 horas de vuelo. Con más de 260 unidades entregadas en todo el mundo, el avión ha sido seleccionado por más de 15 fuerzas aéreas, incluida la Fuerza Aérea de los Estados Unidos (USAF).

Extremadamente versátil, el A-29 Super Tucano puede realizar una amplia gama de misiones, incluyendo ataque ligero, vigilancia e interceptación aérea y contrainsurgencia. El A-29 es robusto y versátil, pudiendo operar desde pistas remotas y sin pavimentar en bases operativas avanzadas en entornos hostiles con poco apoyo, con bajos costes operativos y alta disponibilidad (por encima del 90%). Además de las funciones de combate, el avión se utiliza ampliamente como entrenador avanzado.

Su capacidad para simular misiones de combate y cargar y descargar datos de vuelo lo ha convertido en una plataforma de entrenamiento muy eficaz. Como auténtico avión multimisión, el A-29 es lo suficientemente flexible como para proporcionar a las fuerzas aéreas una única plataforma de ataque ligero, reconocimiento armado, apoyo aéreo cercano y entrenamiento avanzado, optimizando así sus flotas. Está equipado con una variedad de sensores y armas de última generación, incluyendo un sistema electro-óptico/infrarrojo con designador láser, gafas de visión nocturna, comunicaciones seguras y un paquete de enlace de datos.

Sus sistemas permiten recopilar y compartir información crítica en el tiempo, y la aeronave puede operar como parte de un entorno en red. En resumen, el A-29 Super Tucano representa el patrón oro en su campo, combinando un rendimiento superior de la aeronave con armas del siglo XXI, sensores integrados y sistemas de vigilancia para crear un componente altamente eficaz de la potencia aérea.