IBERDROLA, S.A. 
Las dos empresas españolas compiten por convertirse en líderes del hidrógeno verde, con inversiones previstas por valor de miles de millones de euros. Los recientes acuerdos les ayudarán a vender parte de su producción prevista de hidrógeno verde y derivados a clientes industriales deseosos de descarbonizarse en la potencia económica europea, Alemania, y en los países vecinos a través de los Países Bajos.
El hidrógeno verde se produce utilizando energías renovables y se considera clave para descarbonizar la economía europea en el futuro. Sin embargo, dado su coste, los proyectos de hidrógeno verde en general no suelen ser competitivos sin subvenciones.
El acuerdo que Cepsa firmó el miércoles con Yara Clean Ammonia, que forma parte de la noruega Yara International, ayudará a establecer un corredor marítimo de hidrógeno verde entre el puerto español de Algeciras, cercano al centro de hidrógeno verde de Cepsa, y el puerto holandés de Rotterdam.
Cepsa, que pertenece en parte al fondo soberano de los Emiratos Árabes Unidos Mubadala, también firmó un acuerdo con la empresa holandesa Gasunie para acceder a su red de transporte de hidrógeno verde en los Países Bajos.
El anuncio de Cepsa sigue al de Iberdrola el martes, cuando firmó dos acuerdos con el mismo objetivo: establecer un corredor marítimo entre España y los Países Bajos.
Cepsa se ha comprometido a invertir 3.000 millones de euros (3.240 millones de dólares) en su emblemático proyecto de hidrógeno verde en la región española de Andalucía. El plan incluye una planta de amoníaco verde de 1.000 millones de euros.
El presidente ejecutivo de Iberdrola, Ignacio Galán, declaró el martes que las inversiones previstas por la empresa en hidrógeno verde superan los 3.000 millones de euros, incluida una planta de 750 millones de euros en Huelva para producir amoníaco verde.
(1 dólar = 0,9267 euros) (Reportaje de Pietro Lombardi, edición de Inti Landauro y Louise Heavens)
