PEKÍN, 11 ene (Reuters) - El fabricante de chips estadounidense Intel ha eliminado las referencias a Xinjiang en su carta anual a los proveedores, después de que la empresa se enfrentara a una reacción violenta en China por pedir a las empresas de suministro que evitaran la región afectada por las sanciones.

El mes pasado, Intel recibió críticas en las redes sociales chinas por una carta a los proveedores publicada en su sitio web. La carta del 23 de diciembre decía que a Intel se le había "exigido que se asegurara de que su cadena de suministro no utilizara mano de obra ni se abasteciera de bienes o servicios de la región de Xinjiang" tras las restricciones impuestas por "múltiples Gobiernos".

Este párrafo, o cualquier referencia a Xinjiang o China, ya no figuraba en la carta, según una revisión de Reuters de la misma página el martes. La carta dice ahora que la empresa prohíbe "cualquier tipo de trata de seres humanos o de trabajo involuntario, como el trabajo forzado, vinculado a deudas, en prisión, en régimen de servidumbre o en condiciones de esclavitud, en sus extensas cadenas de suministro".

Intel no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios. El mes pasado se disculpó por las "molestias" que había causado, diciendo que su compromiso de evitar las cadenas de suministro de Xinjiang era una expresión de cumplimiento de la ley estadounidense, más que una declaración de su posición sobre el tema.

Las empresas multinacionales se han visto sometidas a la presión de tener que cumplir con las sanciones comerciales relacionadas con Xinjiang sin dejar de operar en China, uno de sus mayores mercados.

"La cobardía de Intel es otra consecuencia previsible de la dependencia económica de China", dijo el senador estadounidense Marco Rubio en un comunicado el lunes.

Rubio fue uno de los cuatro políticos estadounidenses que presentaron el mes pasado la Ley de Prevención de los Trabajos Forzados de Uigures, en la que se pide que se prohíban las importaciones procedentes de Xinjiang por las denuncias de trabajos forzados en ese país. El presidente estadounidense Joe Biden firmó esta ley el 23 de diciembre.

(Reporte de la Sala de Prensa de Pekín; traducción de Flora Gómez)