Los nuevos requisitos de capital propuestos por los reguladores bancarios estadounidenses para los grandes bancos, si se concretan, violarían leyes federales clave e impondrían innecesariamente costes onerosos al 80% de los activos del sistema bancario del país, afirmaron el viernes los principales grupos de presión del sector.

En consecuencia, la propuesta emitida en julio por la Reserva Federal de EE.UU. y otras dos agencias debería desecharse por completo y volver a publicarse, según una carta de comentarios del Bank Policy Institute y el Financial Services Forum, grupos comerciales que representan a gigantes como JPMorgan Chase & Co y Bank of America.

Otros dos, la Asociación de la Industria de Valores y Mercados Financieros y la Cámara de Comercio de EE.UU., también firmaron la carta.

El sector bancario ha montado una oposición vociferante a la propuesta, que estaría entre las últimas de una serie de reformas realizadas en respuesta a la crisis financiera mundial de hace más de 15 años.

Michael Barr, vicepresidente de supervisión del banco central y uno de los principales artífices de la propuesta, ha defendido la iniciativa en los últimos meses, afirmando que su efecto sobre los costes de los préstamos sería limitado, pero ha señalado que los funcionarios están teniendo en cuenta la reacción del público. El plazo para enviar comentarios finaliza el martes.

Según la carta del viernes, la propuesta provocaría una "revisión completa" de cómo se calcula el riesgo inherente a los activos bancarios, lo que aumentaría los costes de regulación de los bancos. Al mismo tiempo, sus supuestos beneficios no están cuantificados, decía.

La carta decía que un estatuto clave que controla cómo se redactan los reglamentos exige que los redactores de la propuesta sopesen sus costes y beneficios utilizando pruebas, algo que, según afirma, no han hecho suficientemente.

Como resultado, los defectos de la propuesta "sólo pueden subsanarse mediante la propuesta de una nueva norma", decía la carta.

Un portavoz de la Fed declinó hacer comentarios. Los representantes de la Corporación Federal de Seguros de Depósitos y de la Oficina del Interventor de la Moneda no respondieron inmediatamente a una solicitud de comentarios. (Reportaje de Douglas Gillison; Edición de Paul Simao)