"Para acelerar el cambio (a los vehículos eléctricos), tenemos que asegurarnos de que se está construyendo la infraestructura de estaciones de carga", dijo el director ejecutivo de Mercedes-Benz, Ola Kallenius, citado por el periódico. "Eso también es una cuestión de política".

El director ejecutivo de VW, Oliver Blume, se mostró de acuerdo en que se necesita más velocidad y que la construcción de estaciones de recarga es "una tarea común de la economía, el gobierno federal y los municipios".

El gobierno alemán aprobó el pasado mes de octubre un plan para gastar 6.300 millones de euros (6.740 millones de dólares) para aumentar rápidamente el número de estaciones de recarga en todo el país, como parte de su impulso hacia las emisiones netas cero. El plan incluía acelerar las autorizaciones estatales para construir puntos de recarga.

Las asociaciones de la industria, que llevan tiempo quejándose de que el gobierno no ha seguido el ritmo de la rápida expansión de los vehículos eléctricos, dijeron que la aplicación de las propuestas era clave.

"El futuro del automóvil es eléctrico", dijo Kallenius. "Para finales de esta década, queremos estar preparados para la transición completa a los coches eléctricos en nuestro segmento de mercado, siempre que las condiciones del mercado lo permitan", dijo.

"No es una conclusión inevitable, más bien requerirá una gigantesca reconversión industrial".

(1 dólar = 0,9351 euros)