Microsoft se encontró el martes en el punto de mira de dos denuncias presentadas por el grupo de defensa de la privacidad NOYB ante el organismo austriaco de control de la privacidad en relación con su programa de educación en línea, las últimas quejas presentadas contra el gigante tecnológico estadounidense.

Los programas educativos en línea ganaron popularidad durante la pandemia del COVID-19, a medida que las escuelas pasaban a impartir clases a distancia y los estudiantes se convertían en alumnos en línea.

Los agravios de NOYB (None of your business) se centran en la suite de programas de software para estudiantes 365 Education de Microsoft, que incluye Word, Excel, Microsoft Teams, PowerPoint y Outlook.

En su primera queja, el grupo de defensa alegó que Microsoft traslada su responsabilidad como responsable del tratamiento de los datos personales de los usuarios en virtud de las normas de privacidad de la UE conocidas como Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) a las escuelas, que no disponen de los datos necesarios.

"Con el sistema actual que Microsoft está imponiendo a los colegios, éstos tendrían que auditar a Microsoft o darles instrucciones sobre cómo procesar los datos de los alumnos. Todo el mundo sabe que este tipo de acuerdos contractuales no se ajustan a la realidad", afirmó en un comunicado Maartje de Graaf, abogada de NOYB.

"Esto no es más que un intento de trasladar la responsabilidad de los datos de los niños lo más lejos posible de Microsoft", añadió.

La segunda denuncia se centra en las cookies instaladas en 365 Educación de Microsoft. Los anunciantes utilizan cookies para rastrear a los consumidores.

"Nuestro análisis de los flujos de datos es muy preocupante. Microsoft 365 Educación parece rastrear a los usuarios independientemente de su edad. Es probable que esta práctica afecte a cientos de miles de alumnos y estudiantes de la UE y del EEE (Espacio Económico Europeo)", declaró Felix Mikolasch, abogado de NOYB.

NOYB instó a la Autoridad Austriaca de Protección de Datos a investigar sus quejas y multar a Microsoft.