La consejera delegada del gigante petrolero brasileño Petrobras, Madga Chambriard, dijo que el presidente del país le pidió que trabajara para impulsar la economía nacional al tiempo que mantuviera la rentabilidad de la firma petrolera.

Chambriard, que asumió el cargo de máxima ejecutiva de la empresa estatal después de que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva despidiera al anterior director general en mayo, dijo en su toma de posesión formal el miércoles que la visión de Petrobras para Brasil está alineada con las prioridades del presidente.

La postura de Chambriard fue secundada por Lula, que habló durante el acto celebrado en el centro de investigación CENPES de Petrobras en Río de Janeiro.

"Nadie quiere que los accionistas pierdan un céntimo", dijo Lula. "Nadie quiere que Petrobras sea una empresa deficitaria".

Las acciones de Petrobras se desplomaron el mes pasado después de que Lula despidiera al anterior consejero delegado, Jean Paul Prates, ante el temor de que buscara instalar a un nuevo director general que impulsara la economía de Brasil a expensas de sus accionistas.

Para satisfacer la petición de Lula, una de las principales prioridades de Chambriard es acelerar el plan de inversiones de 102.000 millones de dólares de la empresa para el periodo 2024-2028, que, según dijo, tiene el potencial de generar "cientos de miles de puestos de trabajo".

La semana pasada, Chambriard anunció su nuevo equipo directivo y nombró a tres directores con conocimientos técnicos y una larga trayectoria en las empresas estatales del país.

Tras el acto del miércoles, Chambriard declaró a los periodistas que no prevé más cambios en la cúpula directiva de la empresa.