Los trabajadores de unos importantes grandes almacenes de Tokio se declararon en huelga el jueves después de que fracasaran las conversaciones con la dirección sobre la venta prevista de su empresa, lo que supone la primera gran huelga que ve el país en décadas.

Unos 900 trabajadores de la emblemática tienda Seibu, en el bullicioso distrito de Ikebukuro, protestan por la naturaleza de la venta prevista de su empresa Sogo & Seibu, una unidad del gigante minorista Seven & i, al fondo estadounidense Fortress Investment Group.

Buscan garantías de empleo y de continuidad del negocio, descontentos con los planes comunicados de que el minorista de electrónica de descuento Yodobashi Holdings se haga con aproximadamente la mitad de la tienda.

Los críticos, entre los que se encuentran funcionarios locales de Ikebukuro, argumentan que tal cambio también abarataría la imagen de la tienda. Yodobashi es el socio de Fortress en el acuerdo.

La huelga - la primera en unos grandes almacenes japoneses en 61 años - se produjo tras meses de negociaciones entre la dirección de Sogo & Seibu y el sindicato de trabajadores.

Las huelgas son extremadamente raras en Japón, donde las negociaciones sobre salarios y condiciones de trabajo suelen acordarse amistosamente.

Seven & i se disculpó por la huelga en un comunicado y dijo que Sogo & Seibu seguiría manteniendo conversaciones con el sindicato.

Los demás grandes almacenes Seibu y Sogo abrieron sus puertas con normalidad. (Reportaje de Ritsuko Shimizu y Rocky Swift; Redacción de Chang-Ran Kim; Edición de Edwina Gibbs)