Sony desechó la fusión de 10.000 millones de dólares de su rama india con Zee Entertainment en parte porque Zee no cumplió algunos términos financieros del acuerdo ni presentó un plan para solucionarlos, según una notificación de rescisión revisada por Reuters.

La india Zee negó las acusaciones en una carta a Sony , también revisada por Reuters, y acusó a la compañía japonesa de "mala fe" al cancelar la fusión.

Una fusión Zee-Sony en India habría creado una potencia mediática en la nación más poblada del mundo con más de 90 canales de deportes, entretenimiento y noticias.

Pero Sony puso fin a los planes el 22 de enero, afirmando en un comunicado que lo hacía porque no se habían satisfecho las "condiciones de cierre" tras dos años de negociaciones. Ni Sony ni Zee hicieron público el contenido de la notificación de rescisión.

Revisada por Reuters, la notificación de Sony decía que Zee "no había realizado esfuerzos comercialmente razonables" para cumplir algunos umbrales financieros, incluso en lo relativo a la disponibilidad de efectivo, mientras que una "falta de prudencia comercial" por parte de la cadena india contribuyó a su decisión.

En la notificación de 62 páginas, Sony dijo que varios incumplimientos del acuerdo de fusión "no eran remediables y cualquier otro intento de discutir mutuamente sería una formalidad vacía, especialmente dada ... la negación llana (por parte de Zee) y el fracaso en proporcionar una propuesta para proteger" los intereses de Sony.

"Los incumplimientos cometidos por Zee no son de naturaleza 'procedimental o técnica' y tendrán un impacto sustantivo en las transacciones", dijo Sony.

Zee respondió en privado a Sony un día después, el 23 de enero, diciendo que negaba todas las acusaciones de Sony, añadiendo que la demanda de la compañía japonesa de una indemnización por rescisión de 90 millones de dólares era "legalmente insostenible".

La rescisión fue "efectuada de mala fe" y "es injusta, errónea desde el punto de vista jurídico", escribió Zee en su carta, en la que pedía a Sony que retirara su notificación.

Un portavoz de Zee declinó hacer comentarios, mientras que Sony no respondió a las preguntas de Reuters.

Las acciones de Zee han caído alrededor de un 30% desde que el acuerdo se vino abajo.

Su negocio ha tenido dificultades a lo largo de los años. Los ingresos publicitarios de Zee cayeron a 488 millones de dólares en el ejercicio 2022-23, frente a los cerca de 600 millones de cinco años antes. Las reservas de efectivo cayeron a 86 millones de dólares desde 116 millones en ese periodo.

Sony, en su notificación de rescisión, dijo que la posición de caja de Zee era de 4.760 millones de rupias (57,26 millones de dólares) a 30 de septiembre, añadiendo que estaba "muy por debajo de los requisitos" del acuerdo de fusión.

Reuters informó la semana pasada de que a Sony también le preocupaba que el consejero delegado de Zee, Punit Goenka -que iba a dirigir la entidad fusionada-, se enfrentara a una investigación reglamentaria por presunto desvío de fondos de la empresa, acusaciones que él ha negado. La "investigación en curso" se citaba en la notificación de Sony.

Zee era "incapaz de evaluar de forma realista el plazo necesario para resolver todas las cuestiones pendientes", afirmaba la notificación de rescisión de Sony.