TOSHIBA La última asociación es lo que esperaba el ministerio de industria japonés ante la preocupación de que la industria de chips de potencia del país esté demasiado fragmentada para alcanzar al gigante del sector Infineon Technologies AG.
El ministerio dijo por separado que subvencionaría hasta 129.400 millones de yenes, o un tercio de la inversión total, como parte de un esfuerzo para ayudar a la industria nacional de chips de potencia a mantener su competitividad.
Los chips de potencia controlan eficazmente la energía eléctrica en automóviles, dispositivos electrónicos y equipos industriales. El ministerio espera que el mercado mundial de chips de potencia crezca hasta los 5 billones de yenes en 2030.
Según el último plan, Rohm invertirá 289.200 millones de yenes en su nueva planta de la prefectura de Miyazaki, en la isla meridional de Kyushu, para producir chips de potencia de carburo de silicio, que se han hecho populares entre los fabricantes de coches eléctricos porque pueden manejar altos voltajes y son más eficientes.
Toshiba invertirá 99.100 millones de yenes en una vanguardista planta de fabricación de 300 mm que está construyendo en Ishikawa, en el centro de Japón, para producir chips de potencia de silicio.
La inversión forma parte de un plan anunciado el año pasado de gastar 125.000 millones de yenes para duplicar con creces la producción de chips de potencia.
Los chips producidos en las plantas se venderán bajo sus propias marcas.
La colaboración se produce después de que Rohm decidiera invertir 300.000 millones de yenes para unirse a un grupo liderado por la empresa de capital riesgo Japan Industrial Partners (JIP) para absorber Toshiba.
Pero las dos empresas dijeron que habían estado considerando la colaboración "durante algún tiempo", y que la inversión de Rohm en la compra de Toshiba "no sirvió como punto de partida" para el último plan.
Los fabricantes japoneses de chips de potencia como Toshiba, Rohm, Mitsubishi Electric y Fuji Electric tienen presencia mundial. (1 dólar = 143,4400 yenes) (Reportaje de Miho Uranaka y Makiko Yamazaki; Edición de David Goodman, Stephen Coates y Jamie Freed)
