"Los días 6 y 7 de diciembre de 2022, agentes de la Dirección General de Impuestos (DGI) se presentaron en nuestras oficinas técnicas, comerciales y administrativas y procedieron a la colocación de precintos", declaró Vodacom en un comunicado fechado el 8 de diciembre.

La disputa se refiere a una auditoría fiscal para el periodo 2016-2019 por parte de la DGI, que dio lugar a un ajuste de 243 millones de dólares en julio de 2021, según el comunicado. El importe se redujo posteriormente.

Vodacom ha impugnado la decisión y presentó un recurso ante las autoridades judiciales el mes pasado, dijo, pero la DGI ha iniciado acciones para recuperar forzosamente la suma.

No fue posible contactar inmediatamente con las autoridades congoleñas para que hicieran comentarios.

El Congo mantiene una disputa constante con todos sus operadores de telefonía por sus esfuerzos para imponer más impuestos sin permitir que las empresas aumenten los precios para los consumidores.

En marzo, el gobierno aprobó un nuevo impuesto que gravaba cada llamada telefónica, mensaje de texto y megabyte de datos.

El impuesto sustituyó a otro gravamen que fue retirado un mes antes tras provocar protestas públicas y una investigación parlamentaria sobre el destino de los ingresos.

Vodacom afirmó que había tomado medidas para garantizar la continuidad de sus servicios y que estaba utilizando todos los recursos legales.