Se espera que la Bolsa de París abra con poco movimiento el miércoles, a falta de algo lo suficientemente fuerte como para mantener la tendencia alcista iniciada la semana pasada. Hacia las 8.15, el contrato de futuros para entrega en noviembre del índice CAC 40 bajaba 26,5 puntos, hasta los 6.966,5 puntos, lo que sugiere un comienzo de jornada poco alentador.



Ya sin combustible ayer, el mercado parisino registró una tercera sesión de descensos, terminando la sesión con una caída del 0,4% hasta los 6.986 puntos, situándose de nuevo por debajo de la marca psicológica de los 7.000 puntos. Es probable que las fluctuaciones sigan siendo limitadas hoy a falta de indicadores económicos importantes o resultados empresariales que puedan influir en la tendencia, lo que está fomentando una actitud de espera.

El retroceso de los últimos días puede considerarse una fase de consolidación horizontal tras el fuerte rebote de la semana pasada, que llevó al CAC a recuperar casi un 4%.



Desde el punto de vista gráfico, sólo mantenerse por encima del umbral de los 7.000 puntos puede mantener el impulso alcista del índice, pero los analistas técnicos advierten de que el índice podría exponerse a un cambio de configuración si se supera el nivel de soporte de los 6.950 puntos. Por el momento, los inversores se mantendrán a la expectativa, en busca del próximo catalizador alcista que pueda impulsar el mercado aún más al alza.



Hay pocas posibilidades de que esto provenga de la agenda macroeconómica, que parece escasa hoy, con la publicación, no obstante, de las últimas cifras de inflación en Alemania, que deberían confirmar que el proceso de desinflación continúa. A continuación, los inversores tomarán nota de las ventas minoristas en la zona euro, seguidas de los inventarios mayoristas y las existencias de petróleo en Estados Unidos.



Aunque el horizonte a corto plazo se ha despejado un poco, los analistas subrayan que el entorno económico sigue siendo lo suficientemente frágil como para justificar cierta cautela. Muchos estrategas señalan que las previsiones macroeconómicas son cada vez más sombrías, lo que podría repercutir negativamente en el comportamiento de los mercados bursátiles en los próximos meses.



En el mercado de renta fija, el rendimiento de los bonos del Estado estadounidense a 10 años prosiguió, no obstante, su reciente descenso, situándose en torno al 4,57%, su nivel más bajo desde hace casi un mes. La relajación de los tipos de interés reales sirvió de apoyo a Wall Street, que pudo así registrar su séptima subida consecutiva, con ganancias de entre el 0,2% y el 0,9%.





Los dos contratos de referencia del petróleo se estabilizaron tras haber sido víctimas de una recogida de beneficios después de alcanzar máximos de más de un año a finales de septiembre. El crudo Brent cotiza a 81,7 dólares el barril, con una ligera subida del 0,2%, mientras que el precio del crudo ligero estadounidense (West Texas Intermediate, WTI) se mantiene sin cambios en 77,4 dólares. Copyright (c) 2023 CercleFinance.com. Todos los derechos reservados.