La compañía británica dijo el viernes que venderá su participación mayoritaria en el negocio al consorcio Singlife, que incluye la firma de activos alternativos TPG, la aseguradora japonesa Sumitomo Life y otros accionistas existentes de Singlife.

La nueva consejera delegada, Amanda Blanc, prometió reorganizar la organización tras asumir el cargo en julio, y se comprometió a reducir sus operaciones en Asia y Europa.

Los analistas han dicho que la aseguradora está operando en demasiados países y sectores, y sus acciones han quedado rezagadas con respecto a sus rivales.

Las acciones cerraron el viernes con una subida del 5%, a 303,2 peniques, ya que los inversores acogieron con satisfacción la noticia.

"La venta de Aviva Singapur es un primer paso importante en nuestra nueva estrategia para centrarnos más en la cartera de Aviva", dijo Blanc, que ha estado tratando de alejar a Aviva de Asia, donde algunos actores globales han luchado contra la competencia.

La operación, una de las mayores en el ámbito de los seguros en el sudeste asiático, se produce en un momento en el que Singlife busca expandirse en la región.

TPG se convertirá en el mayor accionista del nuevo grupo, que inicialmente se denominará Aviva Singlife en Singapur, con una participación del 35%. Aviva mantendrá una participación del 25%, y otro 20% será para Sumitomo.

El resto estará en manos de otros inversores de Singlife, que comenzó a operar en Singapur en 2017 y ha captado clientes con sus ofertas digitales.

"Creemos que esto constituye una creación de valor excepcional para el grupo (Aviva) y representa un claro cumplimiento por parte de la nueva consejera delegada, Amanda Blanc, de su promesa de actuar con decisión", señalan los analistas de Jefferies.

El acuerdo también consiste en 2.000 millones de dólares en efectivo y valores negociables, y 250 millones de dólares en pagarés de financiación de proveedores, dijo Aviva.

(1 dólar = 1,3664 dólares de Singapur)