Las divisas canadiense, noruega y mexicana se llevaron la peor parte de la debacle del petróleo, que ha caído casi un 14% en 7 días. Cayeron frente a las principales divisas del G10, encabezadas por el dólar estadounidense y el euro. Sin desvelar el análisis del petróleo, lo cierto es que una nueva caída de los precios del crudo seguirá debilitando las divisas mencionadas, y viceversa.

Empecemos por la corona noruega (no la tortilla). La semana pasada, escribimos que "tras validar un patrón de inversión de cabeza y hombros a mediados de julio, [la divisa] sigue bajo presión bajista mientras 11,60 sea la resistencia". La situación técnica no ha cambiado en lo fundamental, salvo que actualmente se está poniendo a prueba la resistencia. Romperla allanaría el camino para una mayor debilidad de la NOK hacia 11,72/75 o incluso 12,00.

La situación del USDCAD es interesante. El rebote en curso desde el pasado mes de julio choca ahora con el límite superior de un canal de consolidación ligeramente descendente, que actualmente resiste en torno a 1,3800. Sin embargo, estaremos atentos a una ruptura de 1,3620 para tomar una posición corta con vistas a un retorno a los mínimos del impulso.

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Fuente: Bloomberg

De vuelta al peso

Por último, terminemos con el USDMXN. A principios de julio, le instábamos a jugar el MXN al alza debido a la amplia brecha de ganancias con el dólar, con un objetivo de 15,94/92 en el par. ¿La recuperación actual socava este escenario? Una vez más, la divisa está probando el límite superior de un canal de tendencia bajista en torno a 18,30. Estaremos atentos a cualquier patrón de reversión bajista que nos posicione para una reanudación de la tendencia subyacente. Por otra parte, una ruptura por encima de 18,30 (que podemos situar junto a 1,0710/80 en el DXY) reforzaría la fortaleza actual del dólar, con una resistencia importante a continuación en 19,55.

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Fuente: Bloomberg