La Comisión Europea expondrá el miércoles sus planes para reforzar la seguridad económica de la Unión Europea mediante una vigilancia más estrecha de las inversiones extranjeras y controles más estrictos de las exportaciones y salidas de tecnologías hacia rivales como China.

El Ejecutivo comunitario presentará un amplio documento para su debate junto con una propuesta de nueva ley que obligará a todos los países de la UE a examinar y posiblemente bloquear las inversiones extranjeras en el bloque para determinar si suponen un riesgo para la seguridad.

La Comisión esbozará sus ideas sobre cómo coordinar mejor los controles a la exportación, en particular de productos que podrían tener aplicaciones militares, y controlar más estrictamente quién puede participar y acceder a la investigación de tecnologías clave.

También presionará para que se adopten nuevas medidas que limiten la fuga de tecnologías sensibles a destinos o países "preocupantes".

Los planes no nombrarán a ningún país, pero la UE ha hecho hincapié en el trabajo con "socios fiables" y en la "reducción de riesgos", la política del bloque para reducir la dependencia económica de China, que domina la tecnología verde y la producción de minerales clave y a la que el bloque mira con más recelo por sus estrechos vínculos con Rusia.

Poner en marcha más medidas a escala de la UE resultará complicado porque los controles de las exportaciones y las inversiones son competencias que los miembros de la UE custodian como propias. Sin embargo, cada vez se aprecia más la necesidad de que el bloque combine su peso económico para competir con países como China y Estados Unidos.

"Es una patata caliente que podría tardar algún tiempo en avanzar. Su aplicación será difícil... pero existe una nueva realidad geopolítica", afirmó un diplomático de la UE.

El Ejecutivo comunitario inició en junio el debate sobre la seguridad económica de la Unión Europea, afirmando que la pandemia de COVID, la invasión rusa de Ucrania, los ataques cibernéticos y a las infraestructuras y el aumento de las tensiones geopolíticas habían expuesto múltiples riesgos nuevos.

Parte de la estrategia consiste en reforzar la competitividad de la UE, diversificar el suministro y los mercados de exportación, impulsar la investigación y la inversión en semiconductores avanzados, computación cuántica y biotecnología y estrechar las asociaciones con los aliados. (Reportaje de Philip Blenkinsop; Edición de Nick Macfie)