Altimmune, Inc. anunció los resultados de primera línea de su ensayo de 24 semanas (extensión de 12 semanas) de pemvidutida en sujetos con NAFLD. Sesenta y seis (66) de los 83 sujetos que completaron el ensayo inicial de fase 1b de 12 semanas sobre la NAFLD consintieron en participar en este ensayo de ampliación de 12 semanas para recibir un total de 24 semanas de tratamiento, y se inscribieron 64 sujetos. El ensayo se realizó sin intervenciones adyuvantes de dieta y ejercicio y se mantuvo el doble ciego del ensayo durante el estudio de extensión.

Se emplearon los mismos criterios de valoración que en el ensayo principal de 12 semanas sobre la HGNA, con un criterio de valoración primario de eficacia de (%) de reducción del contenido de grasa hepática; los criterios de valoración secundarios clave fueron la reducción de la inflamación hepática, medida por los niveles séricos de ALT y cT1, y el % de pérdida de peso. La población del ensayo de extensión de 12 semanas tenía características basales similares a las de la población del ensayo principal de fase 1b de 12 semanas de NAFLD. Al inicio del estudio, en todos los grupos de tratamiento, el IMC medio era de 36,7 kg/m2 y el contenido medio de grasa en el hígado (LFC), medido por IRM-PDFF, era del 22,2%.

La diabetes de tipo 2 estaba presente en el 26,6% de los sujetos y el 73,4% de los sujetos del estudio eran de etnia hispana. El ensayo alcanzó su objetivo primario en todos los grupos de tratamiento con pemvidutida. En las dosis de 1,8 mg y 2,4 mg, los sujetos que recibieron pemvidutida lograron reducciones relativas medias del contenido de grasa hepática del 75,2% y el 76,4%, respectivamente; el 92,3% y el 100% de los sujetos, respectivamente, lograron una reducción del 30% de la grasa hepática, el 84,6% y el 72,7% de los sujetos, respectivamente, lograron una reducción del 50% de la grasa hepática, y el 53,8% y el 45,5% de los sujetos, respectivamente, lograron la normalización de la grasa hepática, definida como una fracción de grasa hepática del 5% o inferior.

Se observaron descensos estadísticamente significativos en los niveles séricos medios de ALT en todos los sujetos tratados con pemvidutide, y en los sujetos con ALT sérica basal =30 UI/L, los niveles de ALT descendieron al menos 17 UI/L en todos los niveles de dosis de pemvidutide. En un subconjunto de sujetos evaluados en función de la respuesta de cT1, el 75,0% y el 100% de los sujetos que recibieron 1,8 mg o 2,4 mg de pemvidutida, respectivamente, lograron una disminución de 80 milisegundos (ms) en cT1. Los niveles elevados de cT1 se han asociado a un mayor riesgo de acontecimientos cardiacos adversos mayores (MACE) y de resultados hepáticos adversos mayores (MALO), y una reducción de 80 ms se ha asociado a una reducción de 2 puntos de la puntuación de actividad de la NAFLD (NAS).

El ensayo también alcanzó su criterio de valoración secundario clave de pérdida de peso en todos los grupos de tratamiento con pemvidutida. Empleando una estimación de la eficacia, se alcanzaron pérdidas medias de peso del 7,2% (ajustadas al placebo, del 6,0%) en los sujetos sin diabetes y del 6,2% (ajustadas al placebo, del 4,8%) en todos los sujetos con la dosis de 1,8 mg. En general, la pemvidutida se toleró bien.

Se notificaron un total de 3 acontecimientos adversos (AA) graves o severos, cada uno de ellos no relacionado con la administración del fármaco del estudio (dolor torácico tras la colocación de un stent cardíaco; infección por Salmonella; e hipertensión mayor de 3 semanas tras la finalización del tratamiento). Tres EA condujeron a la interrupción del tratamiento, siendo uno de ellos la infección por Salmonella, y 2 EA gastrointestinales, 1 (6,3%) en la dosis de 1,2 mg y 1 (6,7%) en la dosis de 1,8 mg. Como era de esperar, los acontecimientos gastrointestinales constituyeron la mayoría de los EA y fueron predominantemente de naturaleza leve.

No se observaron elevaciones de ALT clínicamente significativas. Se mantuvo el control glucémico, y los grupos de pemvidutida demostraron tendencias hacia mejoras en la glucosa en ayunas y la HbA1c a lo largo de las 24 semanas de tratamiento. Se observaron reducciones significativas de la presión arterial sistólica, y los aumentos de la frecuencia cardiaca, típicos de la clase de agentes incretina, fueron mínimos, de 0 a 4 latidos por minuto e independientes de la dosis.