Un grupo de ocho empresas lideradas por la mayor firma tecnológica europea, ASML, pidió el miércoles al parlamento holandés que respalde políticas que impulsen la industria de chips del país, incluido el mantenimiento de las exenciones fiscales a la inversión y a la mano de obra cualificada.

El llamamiento se produce mientras ASML sopesa qué parte de sus operaciones futuras se ubicarán en los Países Bajos, y una semana después de que el gobierno holandés presentara un plan para gastar 2.500 millones de euros (2.700 millones de dólares) en mejorar las infraestructuras de la región de Eindhoven para evitar que ASML se marche.

"ASML necesita seguir creciendo, para satisfacer la enorme demanda de microchips y le pedimos que haga posible este crecimiento, preferiblemente en los Países Bajos, donde estamos llegando a nuestros límites", dijo Frank Heemskerk, jefe de Asuntos Globales de ASML, en una reunión con los legisladores.

Las empresas se quejaron de la excesiva burocracia y la incoherencia de las políticas, así como de las medidas destinadas a reducir la inmigración, a pesar de que el sector de los chips informáticos depende de trabajadores inmigrantes altamente cualificados.

También se mostraron críticas con los planes de recortar las exenciones fiscales a la inversión y animaron al gobierno a mantener las subvenciones a la innovación que, según dijeron, desempeñaron un papel importante en el surgimiento de los Países Bajos como centro europeo de la industria mundial de chips.

ASML es el mayor proveedor mundial de equipos para los fabricantes de chips informáticos. El ex ministro de comercio holandés Heemskerk comenzó a trabajar como principal enlace gubernamental de la empresa en febrero.

Heemskerk afirmó que las infraestructuras, la congestión de la red eléctrica, la falta de viviendas asequibles y las impredecibles políticas fiscales eran los principales escollos para el crecimiento.

Varias empresas que testificaron, entre las que se encontraban el fabricante de chips para automoción NXP y los proveedores de equipos para chips ASM International y Besi, afirmaron que las medidas adoptadas en el marco de la inversión prevista en Eindhoven, apodada "Proyecto Beethoven", deberían aplicarse de forma más amplia.