Monte dei Paschi di Siena obtuvo el lunes la aprobación del Banco Central Europeo para su planeada ampliación de capital, aunque el banco estatal italiano aún debe superar la volatilidad de los mercados.

Los accionistas de Monte dei Paschi (MPS) -que es propiedad del Estado en un 64% tras un rescate en 2017- votarán el 15 de septiembre sobre sus planes de vender nuevas acciones por hasta 2.500 millones de euros (2.500 millones de dólares) a mediados de noviembre.

MPS necesita el dinero para enviar a parte del personal a la jubilación anticipada, invertir en tecnología y reforzar las reservas de capital.

La preocupación por la estanflación que sacude a los mercados complica las perspectivas de la petición de efectivo, dicen los banqueros y los analistas, ya que MPS no puede ofrecer un descuento atractivo en las nuevas acciones debido al tamaño de la emisión en relación con su valor de mercado, que se está reduciendo rápidamente.

En un desafío adicional, las elecciones anticipadas en Italia el 25 de septiembre podrían avivar la volatilidad en las próximas semanas mientras se forma un nuevo gobierno.

El Tesoro italiano considera que la situación política es el principal riesgo para la petición de efectivo, dijeron dos personas informadas de las discusiones. Sin embargo, los banqueros que trabajan en la operación expresaron su preocupación también por la volatilidad del mercado en general.

Las acciones de MPS bajaban un 5% a las 1427 GMT, lo que eleva la pérdida global en lo que va de año al 66% y le otorga un valor de mercado de 319 millones de euros, según datos de Refinitiv.

Hace cinco años, los contribuyentes italianos y los inversores privados inyectaron 8.000 millones de euros en el banco toscano para mantenerlo a flote.

Las dos fuentes dijeron que el Tesoro italiano no se sentía obligado a alcanzar el objetivo máximo de 2.500 millones de euros y que estaría cómodo también con una cantidad ligeramente inferior.

El Estado contribuirá con 1.600 millones de euros a la captación de capital en función del tamaño de su participación, y el resto deberá proceder de inversores privados para evitar incumplir las normas de la Unión Europea sobre ayudas estatales.

El Tesoro quiere asegurar acuerdos con varios inversores ancla dispuestos a respaldar la petición de dinero antes de su lanzamiento, dijeron las dos personas sin dar detalles.

Descartaron las sugerencias de que la captación de capital pueda dividirse en tramos, una posibilidad mencionada en los informes de la prensa italiana. (1 dólar = 1,0076 euros) (Información de Valentina Za y Giuseppe Fonte Edición de Mark Potter)