BERLÍN (dpa-AFX) - El sector de la vivienda ha acogido con satisfacción las mejoras de la ley de calefacción anunciadas por el ministro de Economía, Robert Habeck (Verdes). "Esto es exactamente lo que hemos exigido desde el principio: comprobar la viabilidad de la ley y flanquearla socialmente para no sobrecargar a nadie de forma desproporcionada", declaró el sábado el presidente de la Asociación Federal de Empresas Inmobiliarias y de la Vivienda de Alemania (GdW), Axel Gedaschko, a los periódicos del Funke Mediengruppe. En vista de la grave escasez de artesanos, la propuesta de ampliar el plazo para los edificios existentes también debe considerarse positiva. La CDU/CSU sigue exigiendo la retirada total de los planes.

Tras una acalorada disputa en la coalición, Habeck había mantenido la perspectiva de revisar algunos aspectos de los planes de cambio a la calefacción con energías renovables. "Quiero mejorar la ley", declaró al Funke-Zeitung. Con este fin, anunció conversaciones conjuntas con su nuevo Secretario de Estado, Philipp Nimmermann, para la próxima semana. Así, este martes está prevista una reunión entre Habeck y miembros de los partidos SPD, Verdes y FDP.

Habeck mencionó cuatro áreas susceptibles de mejora. Por ejemplo, la fecha de entrada en vigor prevista para el 1 de enero de 2024 podría retrasarse aplicando inicialmente la ley sólo a los nuevos edificios proyectados en esa fecha. Para los edificios existentes, podría darse más tiempo, dejó claro en un vídeo distribuido por el ministerio. En cuanto a las distintas tecnologías previstas, se podría hacer más, por ejemplo, en el uso de pellets de madera. Especialmente en lo que respecta a las ciudades, habría que lanzar "una gran ofensiva de calefacción urbana". Ya se han hecho muchas excepciones para casos de penuria. Sin embargo, podrían "estudiarse más detenidamente y ser más generosas".

La Asociación Alemana de Saneamiento, Calefacción y Aire Acondicionado (Zentralverband Sanitär Heizung Klima) acogió con satisfacción los anuncios, pero dijo que aún estaba por ver si se aplicarían. También debe quedar claro que "nuevas normativas que aún no existen" no entrarán en vigor el 1 de enero, declaró su Director General, Helmut Bramann, al Funke-Zeitung. Hay que proteger los proyectos de modernización previstos para 2024 según la ley actual.

El jefe de la CSU en el Bundestag, Alexander Dobrindt, también criticó las últimas señales de Habeck. "¿Cuántas enmiendas son ya?", declaró al portal de noticias "t-online". Dobrindt volvió a reclamar: "La ley está jodida de cabo a rabo, desordenada, loca y, por tanto, pertenece a la papelera".

El líder del grupo parlamentario de izquierdas, Dietmar Bartsch, celebró los anuncios. "Es bueno que, tras meses de ideología y fanatismo, se adopte ahora un enfoque pragmático", declaró a Redaktionsnetzwerk Deutschland (domingo). "La perspicacia es el primer camino hacia la mejora". Dijo que ya era hora de estirar el calendario. Es necesario planificar la calefacción pública, dijo. "Millones de hogares podrían ahorrarse bombas de calor cuestionables si existiera una red de calor que funcionara in situ". Bartsch advirtió con respecto a las enmiendas: "Ahora no debe fallar nada más". El crédito de Robert Habeck está agotado".

Los planes legislativos actuales pretenden garantizar que, a partir del año que viene, todo nuevo sistema de calefacción que se instale deberá funcionar con al menos un 65% de energía verde. Como alternativa, será posible cambiar a calor neutro para el clima procedente de una red de calefacción. El cambio se amortiguará socialmente, y también habrá periodos transitorios y disposiciones sobre dificultades, cuyos detalles, sin embargo, son controvertidos.