La italiana Enel espera que los paneles solares que se producirán en una gigafábrica que está construyendo en Sicilia sean significativamente más eficientes que los modelos actuales, ayudando a competir con la producción de menor coste procedente de China, dijo el sábado un alto ejecutivo de la compañía.

Los comentarios en la conferencia Cernobbio 2023 de Nicola Lanzetta, responsable de Italia en Enel, se produjeron mientras un estudio respaldado por Enel afirmaba que Italia y la UE en su conjunto aún tienen la oportunidad de reducir significativamente su dependencia de componentes clave procedentes de China para la transición energética.

Lanzetta afirmó que los paneles solares que se fabricarán en la planta del grupo en Sicilia alcanzarán una tasa de eficiencia del 30% en 2025, frente a una tasa media de conversión de la luz solar en energía de alrededor del 20% para la tecnología actual.

Con la financiación de proyectos de UniCredit anunciada en febrero, Enel ha invertido unos 600 millones de euros (646,4 millones de dólares) para aumentar la capacidad de su planta a 3 gigavatios (GW) en julio de 2024, desde los cerca de 200 megavatios (MW) anuales actuales, convirtiéndola en el mayor productor europeo de paneles solares "bifaciales" de alto rendimiento, o aquellos que producen energía a partir de ambas superficies.

Lanzetta presentaba las conclusiones del estudio realizado por el grupo de reflexión La Casa Europea - Ambrosetti y la Fundación Enel, la entidad de investigación centrada en la energía y el clima de la propia empresa, que señalaba una dependencia media actual de China para el suministro de alrededor del 65% de los componentes utilizados en la tecnología verde en Europa.

La cuestión de la dependencia de China ha pasado a primer plano en medio de las tensiones geopolíticas y las interrupciones del suministro debidas a la pandemia.

Según el estudio, Italia y la UE podrían aumentar su producción nacional para satisfacer más del 50% de la demanda de paneles fotovoltaicos, cerca del 90% de la demanda de baterías y más del 60% de la demanda de bombas de calor de aquí a 2030.

Para alcanzar estos objetivos, las empresas europeas deben apostar por tecnologías innovadoras, al tiempo que aprovechan eficazmente los fondos puestos a su disposición por los gobiernos y las instituciones europeas y aumentan la capacidad de reciclaje, según el estudio.

"El proceso de descarbonización es una oportunidad única para apoyar a importantes sectores industriales de nuestra economía y reducir nuestra dependencia del exterior", afirmó Lanzetta, señalando que se trata de "un objetivo realista siempre que se innove en toda la cadena de valor, en un sentido sostenible".

El ejecutivo también dijo que Enel estaba en vías de alcanzar una capacidad de baterías de 1.700 megavatios (MW) a finales del año que viene.

(1 dólar = 0,9282 euros) (Reportaje de Francesca Landini; Edición de David Holmes)