El gobierno de Japón relajó el martes las restricciones a la exportación de equipos militares, el segundo cambio en menos de cuatro meses, para permitir futuras ventas al exterior de un avanzado caza a reacción que está desarrollando con Gran Bretaña e Italia.

El cambio de norma se aplica únicamente a las exportaciones del caza aprobadas por el Gabinete y se limitará a los países -actualmente 15- que tengan acuerdos de transferencia de equipos de defensa con Tokio por los que se comprometan a resolver pacíficamente las disputas internacionales de acuerdo con la carta de las Naciones Unidas, dijo el gobierno.

Las exportaciones a países implicados en conflictos seguirán estando fuera de los límites, añadió.

Aunque de alcance limitado, el cambio, que llega tras meses de disputas políticas entre el gobernante Partido Liberal Democrático y su socio de coalición Komeito, representa el mayor cambio en la política de exportación militar de Japón en una década, eliminando un posible obstáculo que podría haber interrumpido el programa de aviones de combate.

Bajo ese Programa Aéreo de Combate Global (GCAP), Japón, Gran Bretaña e Italia establecieron el año pasado una organización conjunta y un grupo industrial dirigido por la británica BAE Systems PLC, la japonesa Mitsubishi Heavy Industries y la italiana Leonardo para desarrollar y desplegar el caza avanzado a mediados de la próxima década.

Cualquier prohibición de exportación japonesa que detuviera las ventas en el extranjero y limitara el número de producción podría haber hecho inasequible el avión porque los gastos de desarrollo tendrían que repartirse entre una flota más pequeña.

No obstante, el cambio de norma es controvertido en Japón porque el país aún se adhiere a una constitución de renuncia a la guerra adoptada tras su derrota en la Segunda Guerra Mundial.

También se produce después de que el gobierno del primer ministro japonés, Fumio Kishida, realizara en diciembre otro ajuste de las normas de exportación para permitir la transferencia de equipos de defensa construidos bajo licencia a los países poseedores de los diseños. Esto permitirá a Japón enviar misiles de defensa antiaérea Patriot a EE.UU. (Reportaje de Tim Kelly; Edición de Mark Potter)