Se prevé que las interrupciones de la cadena de suministro mundial, el aumento de los costes laborales y la inflación persistentemente alta en una economía en desaceleración perjudiquen a las empresas de sectores cíclicos como el automovilístico, la construcción de viviendas y el industrial, lo que provocará rebajas de calificación de algunas empresas calificadas con grado de inversión.

S&P recortó la calificación de Nissan en un escalón hasta BB+ o basura, afirmando que su rentabilidad seguirá siendo más débil que la de sus homólogas mundiales, ya que el debilitamiento de la demanda de ventas de coches nuevos en EE.UU. y Europa presionaría los precios de venta.

"Ahora estamos llegando a ese punto de inflexión en el que se va a empezar a ver ese apretón de la recesión sobre los beneficios de las empresas", dijo Jason Friedman, jefe global de desarrollo de negocio de Marathon Asset Management.

Nissan tenía 10.000 millones de dólares en bonos en circulación en dólares estadounidenses, lo que la convierte en el mayor ángel caído desde 2020, dijo BofA Global Research en un informe el martes.

El volumen de ángeles caídos este año puede que no sea tan malo como el de 2020, cuando rozó los 250.000 millones de dólares, pero podría ser significativamente superior a los 18.000 millones de 2022.

Alrededor del 0,8% del índice de bonos con grado de inversión, o 55.000 millones de dólares, se consideraba en riesgo de rebaja y ya cotizaba en la banda de calificación BB o en niveles de bono basura, según el informe.

A diferencia de la energía en 2020, ningún sector está actualmente en apuros y se espera que la Reserva Federal empiece a recortar los tipos de interés si la economía se ralentiza demasiado, dijo BofA Global.

Los gestores de fondos de bonos basura ven las rebajas de calificación como una oportunidad para invertir en empresas de calidad que tienen el potencial de graduarse de nuevo al grado de inversión.

También podrían comprarlos casi 150-200 puntos básicos más baratos que un bono BB equivalente, ya que algunos fondos podrían verse obligados a vender estos bonos por no cumplir sus mandatos de bonos con grado de inversión, afirmó Manuel Hayes, gestor de carteras senior de la gestora de activos Insight Investment.