"El resto de Europa le seguirá progresivamente en la implementación del nuevo esquema de distribución", dijo el grupo nacido de la fusión de Fiat Chrysler y la francesa PSA en un comunicado.

Como parte de sus esfuerzos por recortar costes y apoyar la inversión para la electrificación, Stellantis dijo el año pasado que pondría fin a todos los contratos actuales de ventas y servicios con los concesionarios europeos para todas sus 14 marcas, a partir de junio de 2023.

El plan consiste en avanzar hacia un "modelo de agencia" en el que los fabricantes de automóviles asumen un mayor control de las transacciones de venta y de los precios, mientras que los concesionarios se centran en las entregas y el servicio, dejando de actuar como socio contractual del cliente.

Uwe Hochgeschurtz, director de operaciones de Stellantis para la zona de "Europa ampliada", dijo que el grupo pretendía promover un modelo de distribución "sostenible" y que todas las partes interesadas se beneficiarían.

Stellantis dijo que había realizado una simulación económica comparativa que mostraba que, con el nuevo modelo de distribución previsto, los distribuidores disfrutarían de una "rentabilidad al menos equivalente" y una menor exposición a los riesgos.

Un portavoz de la empresa dijo que las marcas de vehículos comerciales ligeros de Stellantis entrarían en la nueva estructura de distribución a partir del 1 de enero de 2024.