Según personas familiarizadas con Musk y sus empresas, citadas por el Wall Street Journal, el ejecutivo ha consumido LSD, cocaína, éxtasis y setas psicodélicas en fiestas privadas por todo el mundo. También fumó marihuana en público y afirmó tener una receta para consumir ketamina, una sustancia con efectos psicodélicos.

"Nunca falló un control"

El uso ilegal de drogas podría violar las políticas federales y poner en riesgo los miles de millones de dólares en contratos gubernamentales de SpaceX, según la publicación. Un abogado de Musk, Alex Spiro, dijo que Musk se somete "regularmente y al azar a pruebas de drogas en SpaceX y nunca ha fallado una prueba". Añadió que había otros "hechos engañosos" en el artículo del Wall Street Journal, sin especificarlos.
 
El consumo ilegal de drogas también violaría las políticas de la empresa, tanto en SpaceX como en Tesla, y plantearía dudas sobre el papel de Musk como ejecutivo en Tesla, una empresa que cotiza en bolsa, donde el consejo tiene el deber de supervisar la gestión en nombre de los accionistas.
 
El anuncio no provocó ningún tipo de rechazo entre los inversores: las acciones de Tesla subieron un 0,8%, hasta 239,35 dólares, en las operaciones de Wall Street tras las revelaciones del WSJ.