La herencia de Henrietta Lacks presentó el jueves una demanda ante un tribunal federal de Maryland en la que acusa a la empresa biofarmacéutica Ultragenyx Pharmaceutical de beneficiarse ilegalmente de las células que fueron extraídas del cuerpo de Lacks sin su consentimiento durante un procedimiento médico en 1951.

La demanda decía que Ultragenyx, con sede en Novato, California, que desarrolla tratamientos para enfermedades genéticas raras, utiliza la famosa línea de células "HeLa" "como una granja lechera trata a las vacas" para producir en masa materiales para terapia génica.

El patrimonio de Lacks llegó a un acuerdo confidencial en una demanda similar contra el fabricante de equipos de laboratorio Thermo Fisher a principios de este mes.

Los representantes de Ultragenyx no respondieron inmediatamente a una solicitud de comentarios sobre la nueva demanda.

Las células HeLa fueron cortadas del cuello del útero de Lacks sin su conocimiento durante un procedimiento de tratamiento del cáncer en un hospital de Baltimore. La línea celular fue la primera en sobrevivir y reproducirse indefinidamente en condiciones de laboratorio, y se ha utilizado en una amplia gama de investigaciones médicas en todo el mundo.

La historia de Lacks, una joven afroamericana que murió de cáncer en Baltimore más tarde, en 1951, se hizo famosa en el best-seller de Rebecca Skloot de 2010 "La vida inmortal de Henrietta Lacks", que se convirtió en un largometraje en 2017.

La denuncia del jueves decía que la plataforma de fabricación de Ultragenyx cultiva células de Lacks a "escala masiva" para producir "vectores de virus adenoasociados" utilizados en terapia génica para transportar material genético.

El patrimonio decía que la empresa recibe "enormes beneficios de las terapias génicas que fabrica para otras empresas utilizando células HeLa", además de desarrollar sus propias terapias génicas utilizando la línea celular HeLa.

"El sufrimiento de la negra ha alimentado innumerables progresos y beneficios médicos, sin compensación ni reconocimiento justos", decía la demanda.

El patrimonio acusó a Ultragenyx de enriquecimiento injusto. Pidió al tribunal que le concediera el dinero que Ultragenyx ganó con la comercialización de las células y que impidiera a la empresa seguir utilizándolas sin permiso. (Reportaje de Blake Brittain en Washington Edición de David Bario)