Más de 1.000 trabajadores de un almacén de Amazon en el centro de Inglaterra se declararon en huelga el martes en el marco de una larga disputa salarial, según informó el sindicato GMB.

Los trabajadores, que abandonaron las instalaciones del gigante minorista estadounidense en Coventry, también planean hacer huelga el miércoles y el jueves, así como el 24 de noviembre, que es el Viernes Negro y una fecha clave en el calendario de Amazon.

Los trabajadores del centro de Coventry se pusieron en huelga por primera vez en enero.

La última acción se produce al final de un año en el que se han producido disturbios laborales más amplios en el Reino Unido, ya que los empleados exigen mejores aumentos salariales para hacer frente a la elevada inflación.

Ofrecemos salarios competitivos, prestaciones completas y oportunidades de crecimiento profesional, todo ello mientras trabajamos en un entorno laboral seguro y moderno", afirmó Amazon en un comunicado.

"En Amazon, estos beneficios y oportunidades vienen con el trabajo, al igual que la capacidad de comunicarse directamente con la dirección de la empresa.

Amazon, que emplea a 75.000 personas en el Reino Unido, dijo el mes pasado que, a partir del 15 de octubre, el salario mínimo inicial aumentaría al menos una libra por hora, hasta situarse entre 11,80 libras y 12,50 libras, dependiendo de la ubicación.

Los salarios seguirán aumentando hasta situarse entre 12,30 libras y 13 libras la hora a partir de abril del año que viene.

Amazon dijo que los aumentos le costarían 170 millones de libras (209 millones de dólares) y significarían que su salario mínimo inicial habrá aumentado un 20% en dos años, y un 50% desde 2018.

El salario mínimo impuesto por el gobierno británico es de 10,42 libras la hora para los mayores de 23 años.

Amazon ha estado sintiendo el pellizco de los esfuerzos de sindicalización a nivel mundial. El año pasado, los trabajadores de un almacén de Amazon en Nueva York votaron a favor de formar el primer sindicato de la empresa. (1 dólar = 0,8118 libras) (Reportaje de Carl Recine, redacción de James Davey; edición de Sarah Young)