Duke Energy Corp tiene previsto gastar 65.000 millones de dólares en los próximos cinco años, la mayor parte de los cuales se destinarán a sufragar la transición de la compañía energética estadounidense hacia fuentes de energía bajas en carbono, según declaró el miércoles a Reuters el director financiero de la empresa, Brian Savoy.

Savoy, que participó el miércoles en la conferencia de Reuters sobre la Transición Energética Global, dijo que la empresa con sede en Carolina del Norte espera gastar alrededor del 55% en la red eléctrica y que gran parte del resto se destinará a la generación de electricidad renovable.

"La fiabilidad y la asequibilidad son los dos pilares que rigen nuestra estrategia de descarbonización", dijo Savoy.

Duke espera reducir las emisiones de carbono en más de un 50% para 2030 y lograr unas emisiones netas de carbono nulas para 2050.

Los servicios públicos de electricidad y gas de Duke abastecen a unos 10 millones de hogares y empresas en las Carolinas, partes de Florida y el Medio Oeste, y posee unos 50.000 megavatios (MW) de capacidad energética.

Las grandes compañías eléctricas estadounidenses están abandonando ampliamente la generación a partir de combustibles fósiles en favor de fuentes más limpias, como la eólica y la solar, para cumplir los objetivos climáticos, y requieren un fuerte gasto de capital para integrar los nuevos sistemas de energía.

Como parte del plan de Duke, Savoy dijo que la empresa planea retirar todas sus centrales de carbón para 2035, cuando dispondrá de unos 30.000 MW de energías renovables como la eólica y la solar, y unos 10.000 MW de almacenamiento de energía, como baterías.

Para garantizar que la red siga siendo fiable durante la transición a fuentes de energía con menos carbono, Savoy dijo: "Hacemos pruebas de presión con cada retirada prevista para asegurarnos de que tenemos los recursos adecuados."

La empresa cuenta actualmente con unos 16.000 MW de centrales eléctricas de carbón. (Reportaje de Scott DiSavino; edición de Diane Craft)