La escasez de personal puso a prueba los recursos de supervisión, sobre todo en la oficina regional de Nueva York de la FDIC, en los años previos a la quiebra del Silicon Valley Bank y del Signature Bank en marzo, señalaron ambos reguladores.

La dificultad para cubrir los puestos contrastaba fuertemente con el creciente aumento de los depósitos bancarios en el sistema financiero, estimulado en parte por las ayudas relacionadas con la COVID-19 y los bajos tipos de interés.

Los informes mostraron a ambos organismos luchando con algunos de los mismos retos de dotación de personal a los que se han enfrentado todos los empleadores estadounidenses en el caliente mercado laboral que ha surgido de la pandemia, con alrededor de 1,7 puestos de trabajo abiertos por cada desempleado que busca empleo y frecuentes cambios de trabajo por parte de los trabajadores. Tanto la Fed como la FDIC destacaron que sus filas de supervisión se adelgazaron incluso a medida que las instituciones que tenían la tarea de revisar se hacían más grandes y complejas.

En sus respectivas revisiones, tanto la Fed como la FDIC citaron la mala gestión del riesgo en SVB y Signature y la falta de urgencia a la hora de abordar las deficiencias clave como los principales impulsores de las quiebras gemelas.

Pero los reguladores también descubrieron que había lagunas en sus procesos de supervisión que, según ellos, podrían haberse mejorado.

Entre 2016 y 2022, mientras los activos del sector bancario crecían un 37%, los efectivos de supervisión de la Fed disminuyeron un 3%, según su informe. Y desde 2020, una media del 40% de los puestos del personal de supervisión de grandes bancos de la FDIC en la región de Nueva York -responsable de la supervisión de Signature- quedaron vacantes o fueron ocupados por empleados temporales, según la FDIC.

Debido a esas vacantes en la oficina regional de la FDIC en Nueva York, ciertas revisiones específicas de Signature no se completaron a tiempo o no se completaron en absoluto, según la FDIC. Esos retrasos "ralentizaron la identificación temprana" y la notificación de debilidades en el banco, según el informe.

En la Fed, las horas de supervisión en SVB disminuyeron al mismo tiempo que el banco con sede en Santa Clara, California, experimentaba un rápido crecimiento a partir de 2017. Aunque la Fed contaba con 15 empleados a tiempo completo en el equipo de supervisión del SVB, el banco recibió menos recursos de supervisión hasta 2021 en comparación con bancos similares.

"Debido a la percepción de una fuerte posición de liquidez, los supervisores no llevaron a cabo revisiones exhaustivas de la gestión de riesgos y el personal de supervisión se mantuvo relativamente ligero, a pesar del rápido crecimiento" del SVB, según el informe de la Fed.

En el caso de la FDIC, los funcionarios identificaron el elevado coste de la vida en Nueva York, el impacto de la pandemia y la competencia de otros reguladores y empresas del sector privado, así como la competencia interna dentro de la propia FDIC, como las principales razones de la escasez de personal.

Aunque la FDIC dijo que había tomado medidas para hacer frente a la escasez, incluido el logro de un nuevo acuerdo de compensación en 2022 que aumentaba la remuneración de los empleados, advirtió que era necesario seguir trabajando para reforzar su personal de supervisión.

"La escasez de recursos de examen, particularmente en la región de Nueva York, es un riesgo crítico para la misión que requerirá una respuesta sostenida de toda la agencia", dijo la FDIC.