El acuerdo preliminar forma parte de la estrategia del fabricante de automóviles para ampliar su negocio de la llamada "economía circular", que incluye el reacondicionamiento y desmontaje de vehículos, así como la reutilización de piezas y materiales, en medio de los temores de la industria a una escasez prolongada de materias primas.

La carrera hacia la electrificación y los problemas de la cadena de suministro mundial han dificultado enormemente el aprovisionamiento de ciertos materiales y componentes clave (para las baterías, pero también el acero, el cobre, etc.), además de la subida de los precios de la mayoría de ellos.

La JV Stellantis-Galloo operará a través de instalaciones de tratamiento seleccionadas para recoger los vehículos de sus últimos propietarios, con un servicio que se espera poner en marcha a finales de este año en Francia, Bélgica y Luxemburgo, para después expandirse por toda Europa, según afirmaron en una declaración conjunta.

La JV ofrecerá sus servicios a Stellantis y a otros fabricantes de automóviles. Galloo está especializada en el desguace de automóviles y barcos.

La vicepresidenta sénior de Economía Circular Global de Stellantis, Alison Jones, afirmó que devolver las piezas y los materiales a la cadena de valor "preserva los recursos escasos y ayuda a nuestro empeño por alcanzar el carbono neto cero en 2038".

"Utilicemos menos (materiales), utilicémoslos durante más tiempo y reciclémoslos cuando sea posible", declaró durante una rueda de prensa.

No se facilitaron detalles financieros.

Stellantis se ha fijado el objetivo de contar con un 40% de materiales ecológicos en sus vehículos para 2030.

El tercer mayor fabricante de automóviles del mundo por ventas tiene planes para multiplicar por diez los ingresos por reciclaje y por cuatro los ingresos por piezas para 2030, en comparación con 2021, con el objetivo de superar los 2.000 millones de euros (2.100 millones de dólares) en ingresos procedentes de su negocio de economía circular para esa fecha.

Jones dijo que la JV también se apoyaría en el principal centro de economía circular de Stellantis, que el grupo está creando en su complejo Mirafiori de Turín (Italia).

(1 dólar = 0,9350 euros)