El dólar tocó mínimos de más de tres meses y medio frente a una cesta de divisas después de que el gobernador de la Fed, Christopher Waller, señalara la posibilidad de bajar el tipo de interés oficial en los próximos meses si la inflación sigue bajando.
Waller también dijo que estaba "cada vez más seguro" de que el actual ajuste de los tipos de interés resultará adecuado para reducir la inflación hasta el objetivo del 2% de la Fed.
Otra gobernadora de la Fed, Michelle Bowman, dijo que el banco central estadounidense probablemente tendrá que subir más los costes de los préstamos para que la inflación vuelva a su objetivo.
Sin embargo, los operadores parecieron seguir el ejemplo de Waller y aumentaron las apuestas a que el primer recorte de tipos se producirá ya en marzo, con una probabilidad de un recorte de 25 puntos básicos de casi el 33%, frente al 21,5% del lunes, según los últimos datos de la herramienta Fedwatch de CME Group. La mayoría espera un recorte de al menos un punto en mayo, según los datos de CME. Sin embargo, la negociación en los mercados bursátiles fue entrecortada, con el S&P 500 y el Nasdaq parpadeando en rojo por momentos en las operaciones de la tarde.
El mercado vio los comentarios de Waller como la primera señal de que la Fed "reconoce que podría recortar los tipos el año que viene", mientras que otros funcionarios "quitaron parte de la euforia", según Anthony Saglimbene, estratega jefe de mercado de Ameriprise.
Y dijo que "es normal que las acciones se consoliden en los últimos días de un mes realmente fuerte... para el resto del año el impulso está sesgado al alza".
El Promedio Industrial Dow Jones subió 94,83 puntos, o un 0,27%, hasta los 35.428,3, el S&P 500 ganó 2,22 puntos, o un 0,05%, hasta los 4.552,65 y el Nasdaq Composite añadió 13,86 puntos, o un 0,1%, hasta los 14.254,88.
El índice paneuropeo STOXX 600 perdió un 0,30% y el indicador MSCI de valores de todo el mundo ganó un 0,25%.
También el martes, una encuesta mostró que la confianza de los consumidores estadounidenses subió en noviembre después de tres meses de descensos, aunque los hogares seguían anticipando una recesión durante el próximo año.
A finales de esta semana, la atención se centrará en el informe estadounidense de octubre sobre los gastos de consumo personal (PCE), que incluye el PCE subyacente, que es la medida de inflación preferida por la Fed. También las cifras de inflación al consumo de la zona euro deberían aportar más claridad sobre hacia dónde se dirigen allí los precios y la política monetaria.
Tras los comentarios de la Fed, los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense cayeron. Los rendimientos de las notas de referencia a 10 años bajaron 4,8 puntos básicos hasta el 4,340%, desde el 4,388% registrado a última hora del lunes.
En divisas, el índice dólar cayó un 0,398%, mientras que el euro subió un 0,34% hasta 1,099 dólares.
El yen japonés se fortaleció un 0,86% frente al billete verde, hasta 147,41 por dólar, mientras que la libra esterlina cotizaba por última vez a 1,2698 dólares, un 0,58% más en el día.
Con cierto aliento por la debilidad del dólar,
el oro
los precios del oro subieron un 1,4%, alcanzando su nivel más alto desde mayo y encaminándose a su cuarta subida consecutiva. El metal precioso cotizó por última vez a 2.040,82 dólares la onza.
Los futuros del petróleo ganaron fuerza ante la posibilidad de que la OPEP+ profundice los recortes de la oferta en una reunión prevista para el jueves y debido a una caída de la producción de petróleo kazajo relacionada con una tormenta, así como por el debilitamiento del dólar estadounidense.
El crudo estadounidense subió un 2,07%, a 76,41 $ por barril, y el Brent se situó en 81,68 $, un 2,13% más en el día.
