Los datos de la inflación estadounidense de diciembre ya están aquí, y aunque la reacción del mercado fue quizás un poco apagada en relación con las últimas publicaciones y el bombo que se le dio, el mensaje predominante para los inversores fue claro: mantener la calma y seguir arriesgando.

La decisión del Banco de Corea sobre los tipos de interés y los datos comerciales chinos son los principales acontecimientos en Asia, pero es probable que los mercados abran con fuerza después de que las bolsas mundiales subieran, los rendimientos de los bonos bajaran y los diferenciales de crédito se estrecharan el jueves.

Aquí no hay malos augurios de viernes 13.

La inflación anual de los precios al consumo en EE.UU. en diciembre se ralentizó como se esperaba y los precios mensuales cayeron por primera vez desde 2020, cifras que sugieren que la Fed está más cerca de tener la inflación bajo control y, por tanto, más cerca del final de su ciclo de subidas.

Dado que algunos de los mayores movimientos intradía en los mercados financieros el año pasado se produjeron en días de inflación en Estados Unidos, la reacción del jueves no fue explosiva. Quizá los inversores se habían adelantado un poco.

Aun así, el índice mundial MSCI subió por quinto día consecutivo, una racha ganadora que no se veía desde agosto, y el índice bursátil MSCI Asia-ex Japón ha subido ya en nueve de las últimas 10 sesiones.

Una asombrosa subasta del Tesoro estadounidense a 30 años contribuyó a bajar aún más los rendimientos de los bonos, alimentando el apetito de los inversores por salir a toda la curva de riesgo. Una encuesta realizada por Reuters el jueves mostró que los inversores ya están aumentando sus posiciones largas en divisas asiáticas.

En las principales divisas, el yen acaba de anotarse uno de sus mejores días en años. Se disparó más de un 2% por las crecientes especulaciones de que el Banco de Japón revisará los efectos secundarios de su relajación monetaria en la reunión de política de la próxima semana y podría tomar medidas adicionales para corregir las distorsiones de la curva de rendimientos.

Se espera que el Banco de Corea suba el viernes los tipos otro cuarto de punto porcentual hasta un máximo de 15 años del 3,50%, probablemente su último movimiento en su ciclo de endurecimiento.

Mientras tanto, los economistas se preparan para otra tanda desalentadora de cifras comerciales chinas, con las exportaciones cayendo un 10,0% en diciembre y las importaciones contrayéndose un 9,8%, según una encuesta de Reuters.

Tres acontecimientos clave que podrían proporcionar más dirección a los mercados el viernes:

- Decisión sobre los tipos de interés en Corea del Sur (previsión +25 pb)

- Comercio chino (diciembre)

- Hablan Kashkari y Harker de la Fed