El presidente Nemat Minouche Shafik, cuya administración fue criticada por un panel de supervisión del campus el viernes por su respuesta a las protestas, dijo en un comunicado que los organizadores y los líderes académicos no pudieron llegar a un acuerdo que rompiera un punto muerto sobre el campamento, que la administración dice que viola las reglas de la universidad.
Dijo que Columbia no desinvertiría en activos que apoyan al ejército de Israel, una demanda clave de los manifestantes, pero la escuela ha ofrecido invertir en salud y educación en Gaza, y mejorar la transparencia de las participaciones de inversión directa de Columbia, según la declaración de Shafik.
Los manifestantes han prometido mantener su campamento hasta que se cumplan sus tres exigencias: desinversión, transparencia en las finanzas de Columbia y amnistía para los estudiantes y profesores sancionados por su participación en las protestas.
Shafik se ha enfrentado a las protestas de muchos estudiantes, profesores y observadores externos por haber convocado a la policía de Nueva York para desmantelar el campamento, lo que ha provocado más de 100 detenciones. Los esfuerzos por desmantelar el campamento, que los estudiantes volvieron a levantar pocos días después de la acción policial del 18 de abril, han desencadenado docenas de protestas similares en escuelas desde California hasta Boston.
La semana pasada, los dos plazos que Columbia impuso a los manifestantes para que retiraran sus tiendas se incumplieron sin que se llegara a un acuerdo, alegando avances en las conversaciones. No estaba claro qué podría hacer la universidad ahora que dijo que las conversaciones habían fracasado.
Los organizadores estudiantiles no estuvieron inmediatamente disponibles para hacer comentarios sobre la declaración de Shafik, y un portavoz de la universidad dijo que los administradores no tendrían más comentarios.
Las protestas en Columbia y otras universidades estadounidenses continuaron con toda su fuerza durante el fin de semana, con más detenciones en todo el país y escaramuzas entre manifestantes proisraelíes y propalestinos en UCLA el domingo.
