NRx Pharmaceuticals, Inc. ha anunciado que la FDA ha dado permiso a la empresa para proceder con los ensayos en humanos para tratar el Dolor Crónico según la solicitud de Nuevo Fármaco en Investigación (IND) presentada ante la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) para el uso del NRX-101. La solicitud de IND aprovecha la investigación pionera sobre el uso de la D-cicloserina (un ingrediente clave del NRX-101) en el tratamiento del dolor crónico y la reciente obtención por parte de NRx de una patente estadounidense para el uso de la D-cicloserina en el tratamiento del dolor. El NRX-101 en el dolor crónico Se calcula que el dolor crónico es una industria de 72.000 millones de dólares con potencial para crecer hasta alcanzar los 120.000 millones en 2033.

En junio de 2023, coincidiendo con el anuncio de la asociación con Alvogen, la empresa anunció la ampliación de su programa del NRX-101 para abarcar el tratamiento del dolor crónico como próximo foco de desarrollo del NRX-101. La empresa ha anunciado la obtención de la licencia de la patente estadounidense 8.653.120 relacionada con el tratamiento del dolor crónico con DCS y la incorporación de la doctora Apkar Vania Apkarian, catedrática de Fisiología, Anestesia, Cirugía e Instituto de Neurociencia de la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern, al Consejo Asesor Científico de NRx. La Dra. Apkarian es la inventora de la patente y una experta mundial en la investigación del dolor y cuenta con una importante experiencia en el estudio de la DCS en el dolor crónico.

Se ha demostrado que la D-cicloserina (DCS) modula la vía del dolor en cada punto de la cadena neuronal del dolor: la transmisión en el asta dorsal de la médula espinal, la percepción del dolor en el tálamo ("paleoencéfalo") y la memoria y el procesamiento del dolor entre el paleoencéfalo y el córtex. En modelos experimentales y estudios clínicos, los antagonistas NMDA han demostrado atenuar el dolor y han mostrado potencial para reducir el ansia de opiáceos. El DCS no ha demostrado potencial de adicción, a diferencia de la ketamina y otros antagonistas NMDA que se unen al receptor opioide "mu".

El DCS se evaluó en un estudio piloto en la Universidad Northwestern y mostró eficacia en los niveles de dosis más altos del estudio (Schnitzer, 2016). Actualmente se está examinando el DCS en un ensayo de confirmación financiado por el Departamento de Defensa de EE.UU. en el marco del Programa de Investigación Médica Dirigida por el Congreso. El ensayo pretende reclutar a aproximadamente 200 participantes con lumbalgia crónica en la Universidad Northwestern (clinicaltrials.gov NCT03535688). La recopilación de datos ha finalizado y se esperan resultados estadísticos en los próximos meses.

La investigación realizada por NRx Pharmaceuticals demostró una dosis de 25 µg/ml a la que la D-cicloserina se convierte en un antagonista NMDA. La dosis de 400 mg presentada en el ensayo de confirmación de la Universidad Northwestern se sitúa en el extremo inferior del umbral y sugiere la posibilidad de aumentar la dosis de D-cicloserina más allá de los 400 mg, donde se utiliza la lurasidona para prevenir los efectos secundarios del SNC en el NRX-101.