Stellantis retira la bandera italiana de los parachoques traseros de sus Fiat 600 de producción polaca después de que las autoridades italianas acusaran repetidamente al fabricante de automóviles de inducir a error sobre el origen de los vehículos producidos en el extranjero.

El grupo declaró el martes que la decisión se había tomado de forma independiente con el objetivo de "operar con total y absoluta transparencia en cuanto al lugar de ensamblaje de sus productos y evitar cualquier malentendido al respecto".

"Stellantis está firmemente convencida de que siempre ha actuado con total corrección a este respecto", afirmó en un comunicado.

La noticia fue comunicada inicialmente por Milano Finanza en su página web. Los colores verde, blanco y rojo de la bandera figuraban en franjas horizontales en tres pequeñas hendiduras en el parachoques.

La decisión forma parte de un enfrentamiento más amplio entre Roma y el propietario de Fiat, Stellantis, por el descenso de la producción del fabricante de automóviles en el país. El gobierno nacionalista de Giorgia Meloni ha criticado abiertamente a Stellantis por fabricar coches de marcas históricas italianas como Fiat o Alfa Romeo en países de menor coste.

A principios de este año, Stellantis decidió cambiar el nombre de su último modelo Alfa Romeo, que también se fabrica en Polonia, de "Milano" a "Junior", después de que el Ministro de Industria italiano, Adolfo Urso, dijera que el nombre violaba una ley dirigida contra los productos que "suenan italianos" y que afirman falsamente ser italianos.

La semana pasada, la policía fiscal se incautó de más de 130 minicoches Fiat Topolino importados de Marruecos que llevaban en sus puertas una pegatina con los colores de la bandera italiana.

Stellantis declaró el martes que los colores de la bandera italiana en el Fiat 600, así como en el Topolino, sólo pretendían "indicar el origen empresarial del producto", diseñado y estilizado en Italia.

Stellantis afirmó que siempre había indicado claramente que el Fiat 600, lanzado oficialmente el año pasado, se ensamblaba en Polonia. (Reportaje de Giulio Piovaccari; Edición de Alison Williams)