STUTTGART (dpa-AFX) - La filial de automóviles deportivos de VW , Porsche AG, se ha fijado unos objetivos de rentabilidad prudentes, habida cuenta de los numerosos cambios de modelos que se producirán este año. La dirección encabezada por el consejero delegado, Oliver Blume, espera que el rendimiento operativo de las ventas se sitúe entre el 15% y el 17%, según anunció el martes en Stuttgart la empresa, que cotiza en el DAX. Esta cifra sería inferior al margen del año anterior, del 18,0%, y también a lo previsto por los analistas. Porsche prevé unas ventas de entre 40.000 y 42.000 millones de euros. En 2023, la empresa generó unos ingresos de 40.500 millones de euros, casi un ocho por ciento más que el año anterior, gracias también a un aumento de las entregas de un buen tres por ciento.

Este año, Porsche lanzará nuevas versiones del Panamera y del deportivo eléctrico Taycan, así como el Macan totalmente eléctrico, mientras que el nuevo Cayenne también se lanzará a finales de 2023. El clásico deportivo 911 también se renovará a principios de verano. Porsche ya había indicado que los lanzamientos de productos retrasados y escalonados supondrían un reto. A medio y largo plazo, Porsche mantiene sus ambiciones de beneficios, subraya el director financiero, Lutz Meschke, en el comunicado de prensa.

El año pasado, el beneficio por acción preferente cotizada en el Dax pasó de 5,44 euros a 5,67 euros. El dividendo aumentará de 1,01 euros a 2,31 euros por acción preferente. Los accionistas ordinarios - en la actualidad exclusivamente el Grupo Volkswagen y el holding VW Porsche SE - recibirán 2,30 euros por acción.